La Comisión de Economía del ayuntamiento dictaminó ayer a favor de la modificación definitiva de las ordenanzas fiscales de cementerio, instalaciones deportivas y recogida de basura. Es un acuerdo que se toma tras la exposición pública de estos cambios, la resolución de las alegaciones que se han presentado y el informe favorable del Consejo Económico y Social. Para su entrada en vigor aún es necesario que se aprueben por el pleno del ayuntamiento, se reunirá el jueves, y se publiquen en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

Desde el inicio de la legislatura se están revisando la casi totalidad de las ordenanzas fiscales del ayuntamiento, además de crear algunas nuevas, como la que se cobra por las bodas civiles. La intención de esta revisión tributaria es que los costes de los servicios públicos prestados por el ayuntamiento se sufraguen con cargo a los ingresos que se logren de la tasa o precio público o al menos la mayor parte.

TASA DE CEMENTERIO Del paquete de tres ordenanzas fiscales cuya revisión se votó a favor en la comisión de Economía de ayer destaca la subida que se produce en la tasa de cementerio, la que se paga por la sepultura. Si se hace una media de la subida en los distintos tramos de la tasa, el resultado final es que los precios que ahora se pagan se multiplicarán por siete cuando la nueva ordenanza fiscal entre en vigor.

El elevado incremento que se produce en la tasa de cementerio es uno de los argumentos en las alegaciones presentadas por la Unión de Consumidores y por la compañía Ocaso, que considera que la subida es desproporcionada, ya que el precio máximo de los nichos a cinco años "arroja una subida del 85% y el de los nichos a 30 años del 308%" con respecto a los precios actuales. La compañía añade que con las nuevas tasas se verá obligada a "incrementar los capítulos de nuestras pólizas en la parte que en cada caso corresponda".

La Unión de Consumidores (Uce) defiende que la revisión de esta tasa esté en relación al IPC acumulado desde la última subida (en 2002, según Uce, y en 1998, según el gobierno). La Uce considera que los precios propuestos en la revisión de la ordenanza "están muy por encima" de la actualización del IPC de los últimos once años.

Las respuestas que los servicios jurídicos del ayuntamiento dan a estas alegaciones son que el precio de la tasa no debe estar "referenciado necesariamente" al IPC, sino a los costes del servicio, además se recuerda que en la actual situación de crisis, con una ley de estabilidad que exige a las corporaciones un equilibrio de las cuentas públicas, las entidades locales deben proceder a la actualización de las tasas para cubrir el coste de los servicios.

TASA DE BASURA El incremento en la tasa de basura dictaminado ayer en la comisión es de un 8%. Son 73 céntimos cada dos meses al subir la cuota fija que se paga por vivienda, que de 8,34 pasa a 9,07 euros. La subida no afecta a la totalidad de las viviendas de la ciudad, en un tercio de los domicilios se seguirá pagando lo mismo, ya que el incremento solo se aplica a las viviendas que están en las calles de primera a quinta categoría del callejero fiscal.

La subida del 8% sale de la diferencia entre los costes del servicio de recogida de basura, que son 3.623.000 euros, y los ingresos que genera la tasa, que ascienden a 3.459.781 euros. El objetivo es equilibrar ambas cantidades. No obstante, la cifra de costes es anterior a las modificaciones hechas en el contrato entre el ayuntamiento y Conyser.

El ayuntamiento paga por el servicio de la recogida de basura y mantenimiento de contenedores a Conyser (1.850.237 euros de los 3.623.000) y por el traslado y tratamiento en el ecoparque, servicio que está gestionado por otra empresa (1.773.460 euros).