El ambiente gastronómico de tapas y cañas inunda el paseo de Cánovas desde ayer gracias a que Extregusta ha regresado a la primavera, o sea ésta la que haya permitido traer de nuevo la feria de la gastronomía a su fecha de origen, coincidiendo también con el fin de semana que da comienzo la Pasión cacereña. Esta vez, el evento solo ha tenido que trasladarse a una semana después porque la previsión meteorológica señalaba días soleados, y por el momento, así ha sido. Para el resto del fin de semana el tiempo, según estima la Aemet, no defraudará, habrá más sol y ni rastro de lluvias, llegándose a alcanzar los 22 grados, algo que sin duda animará al público a pasar por Cánovas a degustar un arroz a la extremeña, ravioli de cangrejo, bacalao en tempura con salsa de ajo, bocadito de sepia con gamba de cristal o un croissant con pollo y aguacate, además de los postres artesanos, son algunos de los cien platos que ofrece la muestra.
La XIV edición de la feria de la tapa se inició a las 12.00 horas de ayer y aunque el cierre de los expositores es oficialmente a las 18.00, pasada esta hora numerosos asistentes continuaban disfrutando del encuentro. Desde la organización, el presidente de la Institución Ferial de Cáceres, César Vicho, avanza a este diario que el número de personas que asistieron ayer a Cánovas superó las expectativas del primer día de ediciones anteriores y congregó a un gran número de personas, pese a no conocer la cifra con exactitud.
La novedad estrella de este año, según la alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, «es sin duda que no se cambia de fecha más de una vez y puede celebrarse en abril después de que en las dos últimas ediciones no tuviera lugar este mes». Otra novedad es, además, una caseta de cerveza hecha de madera que se encuentra al principio del paseo. Sin embargo, esta edición cuenta con 24 expositores, uno menos que el año pasado, aunque entre ellos se encuentren nuevas incorporaciones de establecimientos que han abierto recientemente en la capital cacereña.
La cifra de los 90.000 asistentes de la pasada edición esperan superarla con creces. «Al menos duplicar la asistencia del año pasado, aunque el máximo está en 150.000 personas, nos conformamos con alcanzar esta última cifra», declaró la alcaldesa en declaraciones a este diario. Opinión que también comparten los organizadores de la cita gastronómica por excelencia.
