El principal problema que según los médicos existe en la actualidad en los centros de Atención Primaria es la falta de sustitutos, necesarios para evitar las acumulaciones --reparto de los pacientes de los médicos que falten entre el resto de los del centro--.

Es la opinión generalizada que a este diario transmite Fernando Pérez Escanilla, coordinador del centro de salud Manuel Encinas de la ciudad, según el cual "la principal distorsión, la más importante, que tienen los centros de salud ahora mismo es que no se pongan sustitutos". Y a ello se suma, añade, el hecho de que "además de no ponerlos ya se ha indicado que no van a pagar las acumulaciones, con lo que no sabemos qué va a ocurrir".

Y ante el que por todos es considerado el principal problema de la Atención Primaria, Pérez Escanilla apunta la consideración de que, en su opinión, "debería contemplarse la sustitución de las ausencias de los médicos, lo que realmente podría hacerse, pues hay médicos en el paro". Y además, añade, "tener un poco más reglado, pues se está en ello pero no se acaba de resolver, el tema de los médicos de los refuerzos, para que formaran parte de los equipos y estuvieran para cubrir las ausencias, que todos los días que cada médico tenga contemplados de ausencia al año estén cubiertos".

Aunque reconoce que con la puesta en marcha de la receta electrónica se ha quitado de la consulta normal aproximadamente un 30% de los pacientes, Pérez Escanilla insiste en que la carga asistencial que aún soportan los médicos de familia "sigue siendo excesiva". Y es que según él mismo advierte, también la propia receta electrónica, que les ha quitado pacientes habituales en las consultas, "genera su propia burocracia, recetas que no pasan, que se vienen a actualizar..., por lo que la carga asistencial que nos ha quitado no es tanta como la que debería".

Con todo, Pérez Escanilla insiste en que, "existiendo receta electrónica el médico no debería ver diariamente más de 35 pacientes, ni más de 30 si es docente". Y ello, explica, "porque una vez eliminadas las asistencias a consulta solo para retirar recetas, los pacientes que acuden son más densos, pacientes que vienen con uno o más problemas que no se pueden resolver en cinco minutos". Antes, concluye, "estos pacientes se compensaban con los que venían a por recetas, pero ahora, al disponer ya de la electrónica, todos los que vienen son pacientes que requieren más atención, a los que tenemos que dedicar más tiempo".