La diócesis angoleña de Benguela, bañada por el Atlántico, está más cerca de Cáceres tras la visita que el obispo de Coria-Cáceres, Ciriaco Benavente, realizó en la primera quincena de agosto invitado al primer congreso misionero celebrado en Benguela, ciudad del centro-sur de Angola que los portugueses fundaron en 1617 y que tiene una población cercana al medio millón de habitantes. "Ha sido un contacto que siempre abre vías de encuentro", indicó el obispo cacereño. Las relaciones entre las dos diócesis no son nuevas: cuatro religiosas de la comunidad de Santa Catarina residen en la casa sacerdotal de la calle Clavellinas y aprovechan su estancia en la ciudad "para realizar estudios aquí", explicó el prelado de Coria-Cáceres.
Esa vinculación motivó la invitación hecha por el titular de la diócesis de Benguela, el obispo Oscar Braga, a su homólogo cacereño, quien estimó interesante que sacerdotes y seminaristas de Coria-Cáceres puedan conocer "la realidad" de la iglesia en Africa, "su vitalidad asombrosa y su dinamismo". "Nosotros podemos aportar --añadió--, dentro de nuestras posibilidades, algo que ellos no tienen, que es ayuda financiera y medios materiales". En una relación entre las dos diócesis, el obispo consideró que "ellos, en el orden espiritual y religioso, pueden enriquecernos a nosotros, como a toda Europa, seguramente, por la pujanza tan impresionante" que está teniendo la iglesia en Africa.
La labor social que realiza la iglesia en Angola, país que ha salido recientemente de una guerra civil de más de treinta años, ha sido "de lo que más me ha llamado la atención", indicó Benavente, porque "con una escasez de medios que es impresionante" se acometen obras "que son admirables" en campos como el sanitario o el educativo. El obispo explicó que ha aprovechado su estancia en el país africano para visitar comunidades de religiosas y de misioneros que atienden centros de enseñanza y de salud, orfelinatos y asilos.
El obispo de Coria-Cáceres fue el único prelado español que participó en un congreso al que también asistieron el cardenal patriarca de Lisboa y el obispo de la diócesis de Coimbra, además de prelados angoleños y más de cuatrocientos religiosos y seglares. La finalidad del congreso era "afianzarse en la conciencia de que toda la iglesia debe ser una iglesia misionera", indicó.
MISION Benavente, que también aprovechó su presencia en Benguela para entregar a los responsables de la diócesis angoleña una aportación económica, recordó que la iglesia en Africa, "que hasta ahora ha recibido a misioneros de Europa", se está conviertiendo en "una iglesia que por su vitalidad está enviando a misioneros a otros lugares". La diócesis de Benguela tiene sacerdotes en Portugal y en países de Africa y de Latinoamérica.
Coria-Cáceres ya mantiene una estrecha vinculación con la diócesis de El Alto, en Bolivia, cuyo obispo ha visitado Cáceres. Arciprestazgos de Coria-Cáceres trabajan en programas desarrollados en El Alto. El obispo explicó que además tienen relaciones con diócesis en las que hay misioneros cacereños, "con los que se tiene una vinculación, ellos siempre pasan por aquí y se les intenta ayudar".
El obispo de Benguela ya ha estado en un par de ocasiones en Cáceres, en visita a las religiosas de la casa sacerdotal de las Clavellinas. De momento son cuatro religiosas. "Hasta ahora, algunas se han marchado y han venido otras, y el interés del obispo --de Benguela-- es tener una comunidad en España para que realicen estudios en nuestro país", aunque, por el idioma y la relación con la excolonia, tienen "mayor presencia en Portugal", resumió Benavente.
