La consejera para la Transición Ecológica, Olga García, ha explicado esta mañana que hay cuatro solicitudes de investigación de los recursos mineros para la extracción de litio en Valdeflores en Cáceres (tres permisos de investigación y una solicitud de exploración). Todas están relacionadas, directa o indirectamente, con las empresas Sacyr e Infinity Lithium. “El permiso de investigación no es una actividad irreversible y en la inmensa mayoría de los casos no conlleva la apertura de una mina y menos de forma inminente”, ha precisado la consejera en un momento de su intervención.

La solicitud más importante y que tiene un trámite más avanzado es la del proyecto de investigación de Valdeflores, que afecta a dos cuadrículas mineras y que es donde se proyecta la mina a cielo abierto. También está el permiso de ampliación de Valdeflores, que afecta a 45 cuadrículas que circundan a las dos anteriores y que está pendiente de resolver las 9.000 alegaciones que se han presentado.

García ha explicado que los proyectos y las solicitudes que entren en la Junta se van a tramitar porque “no se puede cancelar ningún expediente sin justificación, sería un delito y se atacaría la seguridad jurídica” de las empresas.

Pero también ha asegurado que la Junta “no se saltará” y “siempre respetará la autonomía y las competencias de las entidades locales”.

Con independencia de las intervenciones que ha habido, de las palabras de la consejera se interpretan tres cosas. La primera es que el proyecto de la mina sigue en una fase inicial, la del proyecto de investigación, al que debe seguir otro expediente para decidir si se autoriza la concesión de explotación. No hay ninguna garantía de que la planificación de la empresa de que la obra empieza en 2021 se pueda cumplir. Se puede autorizar la investigación, pero nada dice que luego se vaya a autorizar la concesión.

La segunda es que la Junta va a tramitar todos los proyectos, no habrá ninguna cancelación, porque, como ha dicho García, se incurriría en un delito si se hace de manera arbitraria.

La tercera es que la Junta no se saltará la autonomía del ayuntamiento para decidir la ordenación de su territorio. Y en el ayuntamiento se ha dicho por la mayoría de los grupos políticos que no se cambiará el plan de urbanismo para facilitar que se abra la mina. Si no se cambia el plan y están lo suficientemente argumentados los valores que protegen el suelo y evitan la actividad extractiva, no habrá mina.

En resumen: los permisos se seguirán tramitando, podrán ser favorables o negativos, habrá mucho ruido, pero mientras no se cambie el plan de urbanismo en Cáceres y esto esté bien argumentado para que no se aplique la salvedad que prevé la ley de minas, no habrá mina en Valdeflores.