Una cuadrilla, nueve operarios y un encargado de la empresa pública Tragsa, trabaja desde ayer por la mañana en la limpieza del cauce y de las márgenes de la Ribera del Marco. Se ha empezado a limpiar en el tramo de fuente Fría y aguas abajo de la misma. La decisión de actuar en esta zona se tomó a raíz de los daños producidos a causa del temporal de agua y granizo caído en Cáceres hace dos semanas. Esta limpieza es la segunda que se hace en un año, la anterior fue "en octubre o noviembre, gracias a ella --los daños causados por el temporal-- no han ido a más", explicaron ayer operarios de la empresa.

En principio está previsto que los trabajos de limpieza se prolonguen una semana y se actuará en todo el tramo urbano, "aproximadamente en cuatro o cinco kilómetros", indicaron las mismas fuentes. Hasta ahora se ha encontrado "bastante suciedad", que no solo procede de la acumulación de restos a causa del temporal, sino que estaba con anterioridad.

En un montón, junto al cauce, ya tenían acumuladas numerosas botellas de plástico que los operarios habían sacado del agua, donde también habían encontrado compresas, jeringuillas y otros desperdicios y basuras.