Los alumnos del IES Virgen de Guadalupe que estudian en el edificio del antiguo Madruelo regresaron ayer a clase aunque mantienen la protesta por las deficiencias que presentan algunas zonas del centro, como el taller de soldadura y la planta baja del edificio. El centro les había advertido de que las ausencias comenzarían a contar como faltas y eso tiene incidencia en la posibilidad de presentarse después a los exámenes. En todo caso, mantendrán la reivindicación remitiendo escritos a la Junta de Extremadura para reclamar las mejoras. Los problemas en el centro se vieron también ayer en la cámara autonómica, donde el grupo del PSOE reclamó una "pronta solución" a "problemas" detectados. Las deficiencias halladas comenzaron hace seis meses y son grietas en las paredes de una zona del edificio y un desnivel en el suelo de uno de los talleres.