El gobierno municipal acordó ayer que la proposición presentada por el PSOE sobre el servicio de autobuses para alumnos de la Universidad Laboral o Centro de Enseñanzas Integradas (CEI) no se llevase al pleno, y sí a la Comisión Municipal de Movilidad Urbana, decisión criticada ayer por la oposición, que reclama cambios en los recorridos del autobús urbano.

El gobierno se enfrenta a una nueva demanda ciudadana por el autobús. La primera oferta hecha a los padres del CEI, que han constituido una plataforma para exigir un recorrido más directo hasta el centro, fue rechazada. No aceptaron sufragar junto al consistorio un autobús privado. Aunque de haberse admitido, se establecía un precedente que a la larga sería conflictivo para el ayuntamiento: otros colegios podrían pedir el mismo trato.

Otras alternativas pasan por reforzar las líneas del norte de la ciudad durante las horas puntas, cuando todos los autobuses están en servicio, lo que supondría tener que adquirir otro vehículo, que sería el quinto en menos de un año, o una redistribución, que podría provocar quejas de usuarios de otras líneas. Pero el gobierno local, apoyándose en informes de los técnicos municipales sobre frecuencia de paso y ocupación, considera que con el servicio actual de la línea del campus, la que va al CEI, es suficiente.

IU y la plataforma de padres aseguran que esos informes se hicieron en fechas de exámenes o próximas a vacaciones, cuando hay menos universitarios, por lo que consideran que no son representativos de lo que ocurre en esa línea. El PSOE también ha pedido una remodelación de la línea 2, que atiende a La Mejostilla, para dar servicio al CEI. Pero el gobierno local no aceptó ayer su debate en el pleno, y remitió la propuesta a la comisión porque fue lo que se decidió en el pleno de la corporación en diciembre, un acuerdo que, según denunció el PSOE, no se está cumpliendo.