El Museo de Cáceres acoge, hasta el próximo mes de mayo, la exposición Arqueología en seda, una original propuesta de la artista Nathalie Rousselet, que se ha basado en piezas conservadas en este espacio museístico para elaborar fulares. Las pinturas de manos de Maltravieso, un ídolo de cinco mil años de antigüedad, un mosaico romano, una hebilla visigoda o un salero del siglo XVII, entre otros, sirven de inspiración para decorar los pañuelos de seda que elabora Rousselet.

La artista, de origen francés pero radicada en Cáceres, muestra su dominio de la difícil técnica de la pintura en seda, aprendida en París, en unos pañuelos y fulares totalmente artesanos. Le ayudan en esta labor mujeres del mundo rural extremeño, con habilidades adquiridas tras años de experiencia, ya que la filosofía de la artista se basa en su pasión por crear desde la pausa y el trabajo bien hecho, dentro de parámetros sostenibles.