Ampliar las terrazas para hacer frente a las restricciones del coronavirus, sí, pero instalarlas donde nunca ha sido posible... eso no podrá ser. Así lo indicó este viernes el portavoz municipal, Andrés Licerán, al término de la Junta de Gobierno Local. Explicó que el Ayuntamiento de Cáceres está trabajando para autorizar la extensión y creación de nuevas terrazas, pero no lo hará por encima de «la ley de accesibilidad, la seguridad ni los informes de la Policía Local», que impiden esta flexibilización en áreas como Pizarro y La Madrila.

«Se han realizado 233 informes de la Policía Local, se han girado 263 visitas a los establecimientos, se han hecho 151 actas de inspección y se han tramitado 137 ampliaciones extraordinarias, muchas de ellas invadiendo y ocupando aparcamientos en ciertas zonas», detalló el edil, recogiendo los datos aportados por Urbanismo. «Pero no podemos autorizar terrazas sin informes favorables», matizó.

El portavoz salió así al paso de las quejas expresadas este jueves por la nueva Asociación Cacereña de Bares y Restaurantes (Acabares), que critica el retraso en la tramitación de dichas ampliaciones y afirma que hay expedientes parados, e incluso anuncia que muchos negocios se plantean cerrar mientras no tengan terraza, puesto que el público prefiere no entrar al interior. Teme, además, que los bares de La Madrila y Pizarro no sobrevivan porque allí no se permite ningún velador.

Límites legales

En este sentido, Andrés Licerán recordó que «la nueva situación y el impulso que trata de dar el ayuntamiento para favorecer el desarrollo económico de la hostelería, no puede servir para recuperar viejas reivindicaciones que suponían incumplir la ley y que por tanto la seguirían incumpliendo. Esto lo saben los hosteleros desde el principio, especialmente los de algunas zonas, con los que ya nos hemos reunido en numerosas ocasiones, y el alcalde se lo ha trasladado así».

Concretamente, Licerán explicó que «en la calle Pizarro queda clarísimo desde el principio que no hay manera de cumplir la ley de accesibilidad para poder conceder terrazas». Recordó que no es una vía peatonalizada, que existe tránsito de vehículos y que no dispone de un ancho suficiente que permita instalar veladores. «Eso creo que lo entendemos todos», subrayó.

En cuanto a La Madrila, «se trata de una zona saturada a la que si además le añadimos un problema de ruidos, como pueden ser las terrazas, generaríamos un conflicto con los vecinos. Hay que equilibrar el derecho al descanso con el resto de los derechos», dijo el portavoz. El propio Licerán y el concejal de Urbanismo se han reunido con los hosteleros de La Madrila alta para buscar diferentes soluciones que hagan posibles las terrazas, «y a pesar de que hemos trabajado duro, proporcionando diferentes opciones, al final hay que poner encima de la mesa la normativa y muchas veces no es favorable, no podemos autorizarlo», reconoció.

Además, desde el ayuntamiento se pide prudencia y precaución a los establecimientos porque durante el pasado fin de semana ya se tuvieron que tramitan al menos tres denuncias por el incumplimiento de las medidas.

Finalmente, el portavoz destacó el «grandísimo esfuerzo» que están realizando los locales de hostelería de forma generalizada «para sacar a flote sus negocios, con la carga adicional de tener que cumplir con las medidas de seguridad, y además las están cumpliendo estrictamente». Recordó que ello permite transmitir «un mensaje de Cáceres como destino seguro y tranquilo, muy importante para la economía y la imagen de la ciudad».