Propietarios de terrenos ubicadas en las 22 Zonas de Especial Protección de las Aves (ZEPAS) de la región constituyeron ayer en Cáceres la Plataforma de Desarrollo Sostenible, cuyo fin es ser interlocutor con la administración en la aplicación de las normativas que surjan de la Red Natura 2000. Se trata de propietarios de explotaciones agrícolas, ganaderas, forestales o cinegéticas, que suman alrededor de un millón de hectáreas, y que dicen verse afectados por la Red Natura 2000, informa Efe.

El presidente del Grupo de Empresas Agrarias (GEA) de Extremadura, Alfonso Sánchez Ocaña, uno de los promotores de la nueva plataforma, explicó que ha faltado información por parte de las administraciones hacia los propietarios y se han declarado Zepas sin conocimiento de los dueños de los terrenos "y eso es lo que queremos evitar, queremos ser interlocutores".

Sánchez Ocaña manifestó que no hay desarrollo sostenible sin desarrollo económico y recordó que en todos esos territorios afectados por la Red Natura 2000, hay explotaciones agrícolas, ganaderas, forestales o cinegéticas "y hay que mantener la actividad tradicional".