Doscientas setenta personas, de las trescientas convocadas, han sido las participantes en la primera de las sesiones de la Asamblea Final del XIV Sínodo Diocesano de Coria-Cáceres. Las sesiones, que comenzaron el sábado 11 de noviembre, se celebran en el salón de actos del Seminario Diocesano, en Cáceres. Está previsto que sean cuatro sábados seguidos, terminando el 2 de diciembre.
Cada sábado se votarán las propuestas hechas para los cuatro grandes temas sinodales que se han trabajado: el anuncio del Evangelio y la transmisión de la fe, el compromiso social y caritativo de la Iglesia en la sociedad de hoy, la formación y la participación de los laicos en la Iglesia y en el mundo, y la organización pastoral en la diócesis.
Los participantes --llamados sinodales-- representan a una gran cantidad de grupos de las distintas parroquias, movimientos y otras realidades de la diócesis. El sínodo fue convocado por D. Francisco Cerro, obispo de la diócesis de Coria-Cáceres, en marzo de 2014, y el número de personas implicadas en el estudio y trabajo de los temas ha llegado a ser casi cuatro mil.
Las ponencias y propuestas que salgan de la Asamblea Sinodal se presentarán al Obispo para su aprobación y publicación final.
No cabe duda de que el XIV Sínodo es una gran oportunidad para la Diócesis de Coria-Cáceres; una magnífica expresión de la corresponsabilidad de todos los cristianos y la oportunidad que tiene el Obispo de oír directamente el sentir de toda la Diócesis y descubrir por dónde debe seguir caminando esta Iglesia que camina y vive su fe en estas tierras extremeñas.
Uno de los frutos que ya ha logrado el Sínodo es haber hecho descubrir a muchísimos cristianos la necesidad de formarse y profundizar en su fe, conocer mejor la propia diócesis y la Iglesia, y la gran ventaja que ofrece el hacerlo y vivirlo en grupo.
