Suprimir las diputaciones más allá de reducir el gasto, supondría aumentarlo". Son palabras de Juan Andrés Tovar, presidente de la Diputación Provincial de Cáceres, institución que aprovechó ayer la celebración de San Pedro de Alcántara, patrón de la provincia para hacer su propio homenaje a sus trabajadores jubilados en este año.

"En estos tiempos de crisis son muchos los que se preguntan si deberían suprimirse administraciones como esta. Mi respuesta es un no rotundo", apostilló Tovar, que justificó su postura en la necesidad de prestar servicios a los pequeños y medianos municipios apostando por su modernización y sus infraestructuras. "Si no hubiera diputaciones se incrementaría el gasto del resto de las administraciones (locales y regionales), a no ser que se redujera la inversión en los ciudadanos", recalcó el presidente.

HOMENAJE El acto de homenaje a los jubilados comenzó a las 11.00 de la mañana con la celebración de una misa en la concatedral de Santa María oficiada por el obispo de la Diócesis de Coria-Cáceres, Francisco Cerro, y amenizada por la Banda Sinfónica de la institución. Después, familiares y amigos de los protagonistas se reunieron en el salón de plenos de la diputación para acompañar a los jubilados y formar parte también de este pequeño homenaje que acabó entre risas y aplausos en los jardines del Palacio de Carvajal con un vino de honor.

"No tengo más que palabras de felicitación y agradecimiento de parte de toda la institución. Pero sobre todo me gustaría desearos muchísimos años de felicidad y que no dejéis nunca de hacer vuestro trabajo, que no es otro que el ayudar a los cacereños", dijo Juan Andrés Tovar en su discurso a los jubilados, tras entregar uno a uno un obsequio a los homenajeados.