La comisión de Urbanismo votó ayer a favor de incluir entre las previsiones del PGM medio centenar de hectáreas que quedaron como suelo no urbanizable en la aprobación provisional del plan. Con esta decisión vuelven a entrar 2.800 viviendas.El acuerdo se adoptó tras la aceptación de cinco alegaciones que son relevantes por su contenido y la superficie afectada. Es un sector que en la aprobación inicial del PGM tenía 120 hectáreas y 6.375 viviendas. En la ratificación provisional pasó a 68 hectáreas y 3.557. El dictamen de ayer hace que vuelva a la primera situación.
Estos terrenos lindan al sur con la ronda norte y están entre la carretera de Casar y los nuevos residenciales de La Mejostilla. Es una zona de expansión, que incluso es urbanizable en el plan general de urbanismo en vigor. Entre sus propietarios hay empresas promotoras.
Sin embargo, el plan rector del espacio protegido de la ZEPA de los Llanos incluyó en su aprobación inicial parte de este sector en la zona de uso limitado de Nateras, por lo que se retiró del PGM. Los dueños del terreno afectado alegaron pidiendo volver a la situación de la aprobación inicial del PGM.
El argumento de la comisión para admitirlas es que hay un informe de la Consejería de Agricultura, del director de la ZEPA, que considera que estos terrenos no reúnen los valores ambientales que llevaron a su protección hace menos de un año, a lo que se añade, según se expuso ayer en la comisión por parte del equipo redactor del PGM, que hay otro informe de Medio Ambiente similar al del director de la ZEPA.
