Ignacio Salazar-Simpson, copropietario de la productora Lazona, fue un día a ver The Queen. Cuando salió del cine, reflexionó sobre el modo en que el director Stephen Frears había retratado a la reina de Inglaterra durante los días posteriores a la muerte de Diana de Gales: con distancia y cierta frialdad. Le encantó y sintió la necesidad de realizar una película sobre algún hecho histórico español, el 23-F, con ese mismo punto de vista: contando lo que pasó y cómo pasó (intríngulis incluidos).

Varios años después, el filme ya está en marcha. Es un thriller político que, bajo el aséptico título 23-F, se estrenará el 23 de febrero del 2011, cuando se cumplen 30 años del día en el que el teniente coronel Antonio Tejero entró armado en el Congreso de los Diputados y soltó el ya famoso: "¡Quieto todo el mundo!" y España tembló. Ahora el que tiembla es el actor Paco Tous, que da vida al teniente coronel.

Entrar en el Parlamento le costó y le impresionó. Los tiros reales están ahí, en el techo. No es habitual que el Congreso abra sus puertas a las productoras de cine. Solo en cuatro ocasiones lo ha hecho. Al principio, la respuesta que obtuvieron los responsables de 23-F fue un no rotundo. Pero, bajo petición de la propia ministra de Cultura, Angeles González-Sinde, la Cámara Baja finalmente accedió. El equipo pretendía estar dos semanas rodando en el hemiciclo, pero se tuvieron que contentar con tan solo dos días.

La escena da pánico. Da miedo ver a Paco Tous (el comisario de Los hombres de Paco) caracterizado con bigote, tricornio, uniforme y pistola. Anda como un militar, con paso firme y decidido. Y se cuadra dando el consabido golpe en sus zapatos. "¡Quieto todo el mundo!", grita. No dice el típico: "¡Se sienten, coño!". Y explica por qué: "Tejero nunca dijo esa frase. Fue murmurada por otros guardias civiles". "El uniforme marca. Y el tricornio más todavía. Pero yo creo que Tejero ese día estaba bastante nervioso. Detrás de cualquier uniforme hay una persona. Hasta los dictadores tienen hijos", comentó ayer el actor durante un descanso del rodaje.

17 HORAS DE TENSION 23-F empieza ahí, en el asalto al Congreso. Y termina con la liberación de los diputados. La película, escrita por Joaquín Andújar (El oro de Moscú) y dirigida por Chema de la Peña (Isi Disi), narra las 17 horas que transcurrieron entre ambos hechos. Por un lado, están Tejero y sus hombres. Por otro, el rey Juan Carlos que intenta contener al Ejército. En medio, un complejo entramado donde Armada mueve sus hilos.

Juan Diego (Vete de mí) da vida a Armada, un hombre culto que trabaja "por Dios, por el Rey y por España", al contrario que Tejero que solo lo hace "por Dios y por España". "Ver en el cine todos los entresijos del 23-F da vértigo histórico. Es un homenaje a todos los ciudadanos que salieron después del golpe a gritar democracia sí, dictadura no", subrayó el actor. El director de la película añadió que la palabra clave de la película es "rigor", ya que los personajes no se divididen en buenos y malos. "No tomamos partido", explicó.