Después de las emociones fuertes tras la consecución de la Copa del Rey y el anuncio de la despedida de Andrés Iniesta, el Barcelona puede vivir este domingo (20.30 horas) una noche mágica y celebrar su vigésimo quinto título de Liga, y sentenciar al Deportivo a Segunda División.

El estadio Riazor acogerá un choque de extremos, en el que si el Barça puntúa será campeón matemáticamente, aunque es posible que también lo sea antes de jugar según lo que haga el Atlético este domingo en Vitoria ante el Alavés (16:15). Al Depor todo lo que no sea ganar (y su rival no ha perdido esta temporada en Liga) le mandará a Segunda División.

Los coruñeses homenajearán al Barça con el tradicional pasillo por la Copa y después intentarán evitar que el equipo de Ernesto Valverde sume el único punto que le falta para entonar el ‘alirón’. Sus opciones se han reducido a la mínima expresión después de que el Levante volviera a ganar este viernes y les dejara prácticamente con los dos pies en la categoría de plata tras cuatro temporadas consecutivas en la élite.

El equipo de Clarence Seedorf acumula cuatro jornadas sin perder y está en su mejor momento después de dos victorias y dos empates, pero su única opción de sobrevivir pasa por firmar pleno de victorias hasta el final (después del Barcelona se enfrentará a Celta, Villarreal y Valencia), lo que implicaría además concluir el curso con una racha de ocho partidos sin perder. Con los deberes hechos, la Copa conquistada y fuera de la Champions, Valverde dispone de todos los jugadores con la única ausencia de Sergi Roberto, expulsado la última jornada ante el Celta.

Todo apunta a que Semedo será su sustituto y que el resto del equipo será el titular, con la idea de sentenciar el campeonato a las primeras de cambio. Eso permitiría a los internacionales de las distintas selecciones afrontar con más tranquilidad la cuenta atrás para preparar su participación en el Mundial de Rusia.

Valverde pondrá a su equipo de gala, con la duda de si alinea a Coutinho o a Dembelé en la delantera. En el resto de posiciones Ter Stegen estará en la portería, con Semedo, Piqué, Umtiti y Alba en la defensa; Iniesta junto a Busquets y Rakitic. Adelante son fijos Messi y Luis Suárez.