CACERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD - 69: José Marco (5), Alvaro Frutos (5), Sergio Pérez (3), Rolandas Jakstas (19), Víctor Serrano (19) --cinco inicial-- Luis Parejo (11), Tomeu Rigo (3), Guille Corrales (0), Carlos Toledo (4).

LEYMA CORUÑA - 85: Ben Stelzer (20), Zach Monaghan (9), Larry Abia (0), Beka Burjanadze (15), Sergio Olmos (16) --cinco inicial-- Dagoberto Peña (2), Joan Creus (4), Chus Castro (10), Gediminas Zyle (2).

MARCADOR POR CUARTOS: 18-30, 44-45 (descanso), 61-68 y 69-85 (final).

ARBITROS: Carpallo y González Zumajo.

Al Cáceres Patrimonio de la Humanidad se le pone crudo estar en los playoffs . Muy probablemente tendrá que ganar dos de los tres partidos que le restan después de que ayer perdiese en su pabellón frente al Leyma Coruña. El 69-85 fue exagerado, pero el castigo adecuado para un equipo todo corazón, pero demasiado irregular, inconexo, desgastado a estas alturas.

Por si fuera poco, tuvo la baja de última hora de Ibrahima Thomas, que no pudo superar sus molestias en una rodilla, en la que sufre un esguince. No es que su rendimiento esté siendo deslumbrante, pero es una ayuda importante. Y más contra un rival que dispone de tres jugadores de más de 2,10.

Resulta muy difícil ganar cuando en el primer cuarto encajas 30 puntos y en el último solamente metes 8. Síntomas evidentes de que el depósito está en reserva.

Entre que el Cáceres salió flojito y al Leyma Coruña le entraba todo, la situación empezó pronto a estar peliaguda (9-19, min. 6). Bohigas recurrió entonces a Luis Parejo, que no había sido titular con la intención de darle pólvora a la segunda unidad. Poco después irrumpió Guille Corrales, que suele suponer un cheque al portador en cuanto a proteger la primera línea defensiva. Sin embargo, nada cambió al final del primer cuarto (18-30). El exverdinegro Sergio Olmos, con 10 puntos y 6 rebotes ya, era una auténtica pesadilla, pese al acierto en el otro aro que exhibía el creciente Víctor Serrano.

Un robo de balón de Corrales y dos triples consecutivos de Parejo parecieron variar la inquietante tendencia del partido. Con un quinteto muy joven, el despliegue defensivo durante esa fase resultó conmovedor, concediendo solo una canasta en los primeros cuatro minutos del cuarto (30-32, min. 14). Una trabajadísima anotación de Rolandas Jakstas dejó al descanso un esperanzador 44-45. El público se estaba divirtiendo.

POLEMICA El Cáceres pareció enterrar buena parte de sus opciones de ganar en la recta final del tercer cuarto. Hasta entonces se había mantenido en el choque a duras penas, sin acabar de encontrar de nuevo la fórmula y teniendo muchos problemas para controlar el juego. Tampoco le ayudaron demasiado varias decisiones arbitrales que encendieron muchísimo a la hinchada. Solo faltaba ver si el pequeño colchón que habían obtenido los gallegos les sería suficiente (61-68, min. 30).

En el momento en el que se necesitaba un esfuerzo extra se notó el cansancio en los locales, poco acostumbrados a jugar dos partidos en pocos días. Tiros fáciles fallados y pases a la grada fueron el triste colofón a una tarde que pintaba mejor. El Leyma Coruña se limitó a administrar el balón y, cuando más apurado estaba, dárselo a Ben Stelzer.

Breogán y Burgos (fuera de casa) y Palma (en el Multiusos) es lo que le queda al conjunto cacereño. Una complicada hoja de ruta, sobre todo cuando se tienen las fuerzas tan justas. Pero es pronto para sentenciarle.