GUIJUELO: Wilfred, Valero, Martínez, Tejedor, Jonathan Martín, Esteban, Carlos Rubén, De la Mota, Ballesteros, Chuchi, Manu Moreira. También jugaron: Mendy, Ruby, Juanpi, Víctor, Palomi, Chema, Chupri, Tomás, Javi Moreno.

CACEREÑO: Vargas, Gonzalo, Palero, Mejías, Carrizosa, Checa, José Ramón, Medina, Toni, Gaspar, Aarón. También jugaron: Alcala, Miguel López, Alvaro, Ismael Barragán, Elías, Martins, Villalba, Roberto.

GOLES: 0-1 min. 50 Checa, 1-1 min. 53 Chuchi.

ARBITRO: Alfonso Vicente (Castilla y León), asistido por Gómez Gago y Pescador Hernández.

Por primera vez no ganó el Cacereño en esta pretemporada, pero tampoco perdió. Arrancó un meritorio empate en el que seguramente sea el amistoso más exigente de su etapa de preparación: frente a un equipo también de Segunda B --aunque del grupo II-- como el Guijuelo. Y a domicilio (1-1).

Debutó el último fichaje del Cacereño: el mediocentro Ismael Barragán, de 27 años y 1,86 de estatura. Formado en el Sevilla Atlético, la pasada campaña jugó en el Teruel.

El choque sirvió para seguir demostrando que el conjunto de Angel Marcos progresa adecuadamente. En esta ocasión no hubo las alegrías ofensivas de anteriores encuentros, cuando la pegada de jugadores como Toni o José Ramón acabó derrotando a equipos de Tercera División. Fue el momento para demostrar que el sistema defensivo también va camino de funcionar.

La mayor seriedad del compromiso se notó sobre todo en la primera parte. Los dos rivales depararon unos 45 minutos más bien aburridos, de mucha pelea en el centro del campo y pocas aproximaciones a las dos porterías. Si acaso hubo una ocasión para cada uno, lo que explica bien que el aburrimiento se extendiese por la grada del Municipal de Guijuelo.

Marcos quiso darle otro aire al equipo tras el paso por los vestuarios. Retiró a sus dos jugadores más adelantados, Toni y José Ramón, e introdujo a Elías y a un Martins que aún debe coger su mejor forma. Además, también sustituyó al portero Vargas por Miguel López. La batalla por la titularidad bajo palos parece que la va ganando el andaluz, pero no debe confiarse.

DOS GOLES SEGUIDOS El efecto resultó bastante inmediato. A los 51 minutos, Checa, omnipresente en todas las zonas del campo, acertó con la portería del Guijuelo, poniendo así por delante al Cacereño.

Sin embargo, los visitantes pecaron de falta de atención en la siguiente jugada, cuando los salmantinos sacaron de centro. Chuchi igualó inmediatamente aprovechando un despiste verde y volvió a dejar las cosas como estaban apenas un par de minutos antes.

El movimiento en el marcador despertó definitivamente el encuentro y los dos conjuntos buscaron desequilibrar, tratando de administrar el cansancio de sus jugadores con nuevos cambios.

La última media hora fue más del Guijuelo, pero el Cacereño también dispuso de alguna ocasión para desequilibrar.