Pudo resultar mejor y mucho peor. La selección española partirá como firme candidata a clasificarse para los cuartos de final de la Eurocopa 2008. Quedó encuadrada con Rusia, Suecia y Grecia en el grupo D, pero, en caso de pasar, tendrá que vérselas con uno de los clasificados del grupo C, que estará integrado por Italia, Francia, Holanda y Rumanía. De nuevo los cuartos de final se presentan como la gran referencia para medir el valor de un equipo que no acaba de dar la talla que se le supone en los grandes torneos.

Tanto el seleccionador, Luis Aragonés, como los representantes de la Federación Española de Fútbol (RFEF) presentes en Lucerna resoplaron cuando comprobaron que la tercera bola del bombo tres no contenía el nombre de España. Hubiese significado ir a parar el grupo C, al que hubo que adjudicarle sin remedio la tópica calificación de grupo de la muerte. Nada menos que Italia y Francia, los dos finalistas del último Mundial, cayeron en él, acompañados por Holanda y Rumanía.

OBSTACULOS Aragonés, que en la víspera volvió a desdecirse y dejó caer que su futuro al frente de la selección dependerá de lo que pase el verano próximo en Austria y Suiza, ya sabe que el camino hacia un título que España no gana desde 1964 estará cuajado de obstáculos muy importantes si es que hace valer su favoritismo en la liguilla inicial. En ella, Grecia aparece como el rival más preocupante. Los griegos, campeones en Portugal-2004 de la mano de Otto Rehhagel, no estuvieron en el Mundial de Alemania, pero se clasificaron para la fase final de la Eurocopa con aparente facilidad, con un solo partido perdido y siete puntos de ventaja sobre Turquía, la otra clasificada.

"Tengo un gran respeto por todos, aunque pienso que se trata de un grupo accesible. Habrá que dejarlo todo en el campo para pasar. Me preocupaban los cruces y serán difíciles y complicados. La concentración será fundamental. Desde fuera puede parecer otra cosa, pero hay que respetar a los contrarios", declaró el seleccionador tras conocer el resultado del sorteo. En ese sentido, recordó que en Portugal cayó en suerte un grupo de un nivel parecido y España quedó apeada a las primeras de cambio.

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