El Mérida viaja a la tierra de la sal para curar definitivamente sus heridas. El equipo de Diego Merino suspira por su primera victoria y este sábado (16.00 horas) lo intentará ante el Cádiz B. Curro es la única baja en las tropas romanas para este compromiso.

«No hay nada innegociable, solo el trabajo», señaló Diego Merino, técnico pecholata. No quiere atisbo de relajación en su plantilla, aunque sus últimos dos partidos el equipo va tomando la forma y el estilo que quiere.

«Creo que esto es una carrera de fondo en la que estamos sentando las bases y en las dos últimas semanas hemos visto un equipo más competitivo y que ha estado francamente bien», analizó la dinámica de su equipo.

El Cádiz B está sorprendiendo en este arranque. Según Merino, el «mejor filial» del grupo. «Son los que mejor han competido en este inicio, tienen características propias de un filial pero además disfrutan defendiendo», concretó.

OFENSIVA Y CAMBIOS / No comparte Merino el pensamiento de la prensa y gran parte de la afición. «Creo que la casa hay que construirla por los cimientos, y pienso que el equipo en ataque ha hecho cosas trabajadas e identificables. El otro día tuvimos ocasiones para llevarnos los tres puntos», rebatió Merino ante las preguntas sobre la supuesta falta de potencial ofensivo de su equipo.

Asimismo, también se revolvió con destreza al ser preguntado por las posibilidades en la delantera. «Si el otro día Cristo hubiera marcado las dos que tuvo no se hablaría de esto», apuntó Merino. Por el momento es su delantero elegido y Pino y Miguel Ángel Espinar tendrán que esperar su oportunidad.

Todo apunta a que, salvo ínfima modificación o lesión de última hora, repetirá el once inicial que le dio el empate en Badajoz (1-1) y en el Romano la semana pasada frente al Sevilla Atlético (0-0). A las 16.00 horas en la Ciudad Deportiva El Rosal se desvelará el plan del Mérida para cosechar la primera victoria en la era Merino.