El Escubal Badajoz tiene esta tarde una cita muy importante de cara a su futuro. Se enfrenta en el Pabellón de La Granadilla (18.00 horas) al Pozoblanco, otro equipo de los que lucha por la salvación en la División de Honor Plata de balonmano. Una victoria sería un gran impulso para el conjunto de Raúl Caballero, mientras que cualquier otro resultado sería un golpe muy duro, sobre todo después de perder por un gol la semana pasada en la pista del Jovellanos Gijón.

La situación es muy compleja en la zona baja y todo hace indicar que no se decidirá hasta el final. Los seis últimos clasificados están en un pañuelo de solo tres puntos, por lo que cualquier triunfo entre ellos tiene valor doble. El Escubal contabiliza 6 puntos, uno más que su oponente de hoy, que se caracteriza por tener la segunda peor defensa de la competición.