La bolsa consiguió ayer el triplete. El Ibex 35 logró un nuevo máximo anual por tercer día consecutivo al rozar los 11.750 puntos con una subida del 1,32%, animado por el avance de las plazas internacionales y de los grandes valores. Este año, el principal índice español acumula una subida del 27,74%.

Los datos macroeconómicos siguieron dando alas a la inversión, apoyados tanto en las palabras del martes de Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal, que anunció el final técnico de la recesión en EEUU, como en la fuerte apuesta por la renta variable por parte del gurú Warren Buffet. Con Wall Street instalado en máximos anuales, las bolsas europeas no quisieron perderse el festín comprador. El selectivo español alcanzó los 11.746 puntos.

Varios frentes, todos aliados con la renta variable, se abrieron para insuflar aún más optimismo entre los inversores. Ayer se conocieron los datos de la inflación en la zona euro y en Estados Unidos.

En el primer caso, subió cinco décimas en agosto, moderando su caída hasta el -0,2%; en el segundo subió un 0,4%. En este país, también se publicó un alza mayor de lo esperado de la producción industrial, del 0,8% y un estrechamiento del déficit corriente hasta 98.800 millones de dólares. Las solicitudes de hipotecas, por su parte, bajaron el 8,6% durante la última semana.

Todos los pesos pesados de la bolsa española cerraron con ganancias. Telefónica subió el 1,07%; Santander, el 1,62%; Repsol, el 1,92%; BBVA, el 0,57%; e Iberdrola, el 0,68%. Los valores más alcistas fueron Ferrovial (+9,22%) y Cintra (+7,74%). Los inversores respondían así a la futura aprobación del proyecto de fusión de ambas el próximo mes. Inditex, que presentó resultados antes de la apertura (ganó un 8% menos en el semestre, pero mejoró las previsiones), les fue a la zaga, con un avance del 5%. En el lado contrario, destacó Mapfre (-0,74%). El beneficio semestral de las empresas del Ibex 35 cayó un 35%.