El Tribunal Constitucional abroncó ayer a Mariano Rajoy por recusar a tres magistrados progresistas para responder a la iniciativa del Gobierno de atacar a dos jueces conservadores en el recurso contra la ley que prorroga el mandato de la presidencia. Además, el pleno decidió tramitar la recusación del Gobierno contra los jueces Roberto García-Calvo y Jorge Rodríguez-Zapata por haber pedido a la presidenta que dimitiera en junio, al cumplir tres años en el cargo.

El Constitucional dio a conocer ayer el contenido del auto en el que rechaza la triple recusación del PP contra Manuel Aragón, Pascual Sala y Pablo Pérez Tremps. A lo largo de 27 folios, los jueces manifiestan su profundo malestar con la estrategia del partido que lidera Mariano Rajoy.

Los jueces recuerdan que el Constitucional goza de una especial singularidad, ya que sus miembros no pueden ser sustituidos cuando son recusados. Por ello, el alto tribunal considera que la maniobra del PP buscaba alterar la composición del tribunal. Y critica que haya usado su condición de litigante para "entorpecer" o "impedir" la actividad de esta sede judicial. Además, los jueces recriminan al PP que haya basado la triple recusación en una información periodística que iba sin firma y sin citar fuentes. En la información se asegura que los magistrados recusados se habían pronunciado a favor de la constitucionalidad de la ley en una reunión, el 12 de junio, con la presidenta, María Emilia Casas, y otros dos colegas.

DESMENTIDO Pero los seis participantes en el encuentro negaron esta información. El Constitucional apoya el desmentido y afirma que a estos jueces no se les "podía imponer el silencio". Y que "las conversaciones mantenidas" en "el seno del tribunal no son suficientes para basar una recusación". Por ello, exige al PP que "guarde el respeto que institucionalmente le es debido al tribunal".