El estudio provisional del trazado del AVE en su tramo Talayuela-Cáceres, que acaba de ser retomado por el Ministerio de Fomento después de permanecer casi tres años paralizado, se ha encontrado con un rechazo casi generalizado y creciente en Plasencia, mientras que otros ayuntamientos de la región comienzan a especular sobre cómo les afectará el paso de la línea de alta velocidad. El motivo no es el trazado en sí, sino la ubicación de las futuras estaciones.

Durante las últimas horas el ayuntamiento, plataformas de vecinos y colectivos sociales de la capital del Jerte, así como empresarios de las comarcas próximas, han mostrado su oposición a que la estación Plasencia-Fuentidueña se sitúe en el paraje del arroyo Retortillo, como propone el ministerio. Todos coinciden en que está demasiado lejos de la ciudad --a unos 13 kilómetros-- y que sería más apropiado situarla en el entorno de Fuentedueñas, donde actualmente se encuentra el nudo de enlace de las autovías Ex-A1 (Portugal-Plasencia-Navalmoral de la Mata) y A-66 (Ruta de la Plata).

En este sentido, el Movimiento Social de Plasencia (MSU) manifestó ayer a través de su coordinador de infraestructuras, Francisco Martín, que ya han realizado peticiones por carta al Ministerio de Fomento, al presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y a la alcaldesa de la ciudad, Elia María Blanco, para revisar el proyecto. Este colectivo recuerda que desde el 2003 se han presentado casi 300 alegaciones a la ubicación de la estación en arroyo Retortillo (término municipal de Malpartida de Plasencia) e insiste en solicitar una comisión mixta de las tres administraciones para negociar una decisión definitiva.

Además, han recibido el apoyo de la Federación Vecinal Placentina. Su portavoz, Félix García, asegura que la actual ubicación priva a la ciudad y a las comarcas del entorno de una estación intermodal que facilite las comunicaciones a turistas y vecinos de la zona. Asimismo, destacó que la actual propuesta "desfigura" el modelo de crecimiento de la ciudad y condiciona el desarrollo urbanístico del entorno del polígono industrial.

OPOSICION MUNICIPAL La propia alcaldesa, Elia María Blanco, ha declarado que su objetivo es "acercar lo más posible la estación al núcleo urbano", para lo que ha pedido una reunión con el Ministerio de Fomento y la Consejería de Infraestructuras.

La Asociación de Turismo Tierras de Granadilla también mostró ayer su "indignación" por la ubicación de la estación del AVE junto al arroyo Retortillo ya que considera que perjudica a todo el norte de Extremadura.

Por su parte, en Mérida no quieren que la estación del AVE esté en Aljucén --a cinco kilómetros de la capital--, mientras en Badajoz toma cuerpo la posibilidad de que se ubique junto a la Ciudad Universitaria. En Cáceres el ayuntamiento ha solicitado el traslado de la estación dos kilómetros al oeste de las instalaciones actuales, una propuesta que ayer criticó el Sindicato Federal Ferroviario de Cáceres.