La ampliación de la Unión Europea a los países del Este, Chipre y Malta permitirá que Extremadura abandone el furgón de cola comunitario aunque se mantenga entre las regiones Objetivo 1 , cuyo umbral de riqueza está por debajo del 75% de la media de la UE. En la Europa de los 25, el efecto estadístico posibilitará que el Producto Interior Bruto (PIB) extremeño pase del 53% actual, al 58,4%.

La incorporación de diez nuevos países --República Checa, Estonia, Chipre, Letonia, Lituania, Hungría, Malta, Polonia, Eslovenia y Eslovaquia-- motivará que la renta media de la UE baje de forma notable debido a que estos países tienen un nivel de desarrollo económico menor que el de los actuales Estados miembros. Según el último Informe sobre la Cohesión Económica y Social del comisario europeo de Política Regional, Michel Barnier, Extremadura pasaría de ser la quinta región más pobre, a ocupar el puesto número 38 en el ránking de las zonas con menor renta.

En la actualidad, Ipeiros y Dytiki Ellada (Grecia), Isla Reunion (Francia), Azores (Portugal) y la comunidad extremeña son las regiones más pobres. Con los cambios a partir del 2004 se producirá una mudanza geográfica de las disparidades económicas. El nuevo mapa sitúa a las regiones polacas de Lubelskie, Podkarpackie y Podlaskie como las zonas más desfavorecidas, con un PIB por debajo del 32% respecto de la media de la UE.

Con la ampliación, sólo cuatro comunidades españolas (Galicia, Castilla La Mancha, Andalucía y Extremadura) estarían incluidas en el grupo Objetivo 1 , aquellas zonas de la UE que disfrutan de mayores ayudas procedentes de los fondos comunitarios.

Los últimos estudios económicos señalan que, en los últimos años, la región ha recortado diferencias con las comunidades más ricas de la Europa comunitaria aunque zonas como el Area de Londres, Bruselas o Hamburgo cuadriplican los niveles de riqueza de Extremadura.