Los vecinos de Villafranca de los Barros tratan de recuperar la normalidad después de que el domingo, Manuel Delgado, de 78 años, decidiera acabar brutalmente con la vida de su esposa, Catalina Tolosa, de 69. Ayer fue el último de los tres días de luto oficial que se decretaron en el pleno extraordinario celebrado tras el macabro suceso y según explicó el portavoz municipal, Joaquín Rodríguez, "con el recuerdo de Cati presente, poco a poco la gente vuelve a sus ocupaciones y se va recuperando la normalidad del día a día".
Catalina Tolosa, muy conocida en el municipio por haber regentado una tienda de ropa, fue asesinada el pasado domingo por su exmarido, Manuel Delgado, tras recibir varios golpes con un martillo y numerosas heridas con un arma blanca en la cabeza y la parte superior del tórax. La pareja se estaba separando y la víctima había denunciado en dos ocasiones al asesino confeso por malos tratos. Delgado tenía una orden de alejamiento desde el pasado 3 de julio que burló a los 10 días. El lunes, cientos de vecinos acudieron conmocionados y consternados por el dolor a la Iglesia de Santa María del Valle a dar el último adiós a Cati.
Tras cometer el crimen, Delgado se entregó en el cuartel de la Guardia Civil, donde permaneció hasta que el martes a primera hora, pasó a disposición judicial. Pese a que su abogado alega problemas de salud, el juez decretó el ingreso en prisión incondicional sin fianza.
