No es ciencia ficción, sino la nueva realidad a la que se enfrentan los 2,5 millones de palestinos de la Cisjordania ocupada. A partir de ahora necesitarán un permiso israelí para residir en Cisjordania, incluso quienes nacieron allí o cuyas familias llevan siglos asentadas en el territorio. De otro modo, se exponen a ser deportados o a entre tres y siete años de cárcel. Así lo estipulan dos nuevas órdenes emitidas por el Ejército israelí que entraron ayer en vigor. Según la Autoridad Palestina, "son más propias de un Estado del apartheid ".

Las nuevas ordenanzas cambian la definición del término "infiltrado", vigente desde 1969, dos años después del inicio de la ocupación militar. A partir de ahora cualquiera sin el mencionado permiso podrá ser acusado como tal y deportado en 72 horas. Pero la ley es tan ambigua, según los expertos, que se desconoce a qué permiso se refiere. Ni las organizaciones de derechos humanos israelís saben si servirán la tarjetas de identidad cisjordana emitidas por la ANP para validar la residencia.

"No sabemos si lo van a hacer, pero la ley es tan abierta que da pie a deportaciones masivas", asegura la abogada del Centro de la Defensa del Individuo (Hamoked), Alba Kolan. En los Acuerdos de Oslo, Israel reconoció la unidad territorial palestina, pero todas sus políticas están dirigidas a romperla. En los últimos años el Ejército ha intentado expulsar de Cisjordania a cientos de palestinos de Gaza, pero los tribunales civiles israelís han frenado la mayoría de casos. "Tuvimos mucho éxito hasta ahora, pero esta orden dificultará la defensa legal de los afectados", explica Kolan.

Israel también ha logrado separar de facto Cisjordania de Jerusalén Este, donde es necesario un permiso especial para entrar, y reducir así la población árabe de la ciudad. Casi 5.000 palestinos fueron deportados de Jerusalén en el 2008, como parte de una lenta y silenciosa campaña de limpieza étnica.

El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, pidió, en nombre de la presidencia de la Unión Europea, explicaciones a Israel sobre las nuevas normativas.