El Centro de Orientación Familiar de Mérida (COF), en el centro de salud Obispo Paulo, concentra la atención para las mujeres en tratamiento anticonceptivo o que desean iniciar uno, por lo que no se verá afectado por la desviación de citologías a matronas. "Ese cambio es para mujeres que no están en tratamiento anticonceptivo, por lo que nosotros seguimos igual y nuestros dos ginecólogos continuarán atendiendo a esas mujeres en sus revisiones y las de sus aparatos, citologías...", explica Diego Domínguez, coordinador del centro.

Según detalla, el COF abarca la población de mujeres de ocho centros de salud (tres de Mérida más los de varias poblaciones del entorno) y la espera es menor para las nuevas consultas y puede alcanzar varios meses para las revisiones. "Nuestros profesionales --dos ginecólogos, dos enfermeros, un trabajador social y un administrativo-- no solo se encargan de las consultas, sino también de visitas formativas, cursos, charlas, etcétera". Según sus datos, unas 6.500 pacientes fueron citadas el año pasado y, de ellas, 900 eran nuevas pacientes.