Un grupo de obreros refuerza con hierros y tablones de madera un edificio de residentes de Mérida tras aparecer una grieta a lo largo de la fachada y producirse algunos desprendimientos.

Los operarios de la empresa Magenta, que construyó hace una década el inmueble en la barriada emeritense de la Corchera, reparan estos desperfectos, que aparecieron el pasado miércoles.

No obstante, la estructura del edificio no reviste "peligro" alguno para los vecinos, según ha explicado a Europa Press Televisión el encargado de la obra, Francisco Gil.

Tras apuntalar unos quince metros de fachada, han procedido a retirar el lienzo de ladrillos para evitar que continúen los desprendimientos y conocer las causas que motivaron la aparición de las grietas, según precisó el encargado, quien indicó que los trabajos se prolongarán durante unos diez días.

"No sabemos si habrá sido en embolsamiento de aire que habrá entrado o bien agua helada que haya dilatado, pero no lo sabemos concretamente", señal.

Los vecinos más afectados han sido los de las plantas bajas y los primeros pisos, tal y como lo ha apuntado Teresa Galán, una de las más perjudicadas ya que en su balcón también han aparecido grietas.

Esta mujer reconoció estar más tranquila tras haber recibido la visita de cuatro arquitectos que han comunicado al vecindario que se trata de un "problema de fachada". "Me han dicho que no hay riesgo ninguno", añade.

Asimismo, explica que hace "bastante tiempo" que habían observado "una grieta de dilatación" en el edificio, lo cual comunicaron en varias ocasiones sin que nadie la inspeccionara hasta ahora. "Yo tengo una grieta desde que me dieron el piso".