Mérida revive con fuerza su pasado romano un año más. Como ya es tradicional, la ciudad se ha engalanado a las puertas del verano para disfrutar de Emérita Lúdica, un evento que celebra su séptima edición con el propósito de revivir el ambiente festivo que acompañaba la celebración de juegos en la capital de Lusitania. La participación activa de los emeritenses va en aumento y las calles del centro han sido testigo del trasiego de numerosos ciudadanos que vestidos de romanos han disfrutado de la amplia programación de actividades.

Desde el pasado viernes cuando se produjo el pistoletazo de salida oficial de este evento con el desfile de entrada de las legiones romanas desde el puente romano hasta el templo de Diana, se han desarrollado talleres, conferencias, espectáculos, representaciones teatrales y actividades musicales. Tampoco han faltado las luchas de gladiadores, con el espectáculo de gladiatura y cuádrigas que tuvo lugar ayer en la plaza de toros a cargo de Emeritae Lvdvs Gladiatorvm, los ritos en el templo de Diana y la gastronomía romana, que este año tiene una importancia vital. De hecho, esta edición es la más gastronómica de todas, ya que al ser Mérida Capital Iberoamericana de la Cultura Gastronómica 2016 se organiza la cuarta edición de la ruta de la tapa romana Sentia Amarantis con un producto mucho más atractivo que años anteriores, que como novedad ha incluido concursos en decoración de estancias hoteleras, habitaciones y patios, al tiempo que los pubs ubicados en la zona centro de la ciudad están ofreciendo ambientación de la época evocando el ocio nocturno al más puro estilo romano.

Este evento no sería nada sin la participación de cinco asociaciones de recreacionistas de la ciudad integradas por más de 200 personas: Emerita Antiqva, Ara Concordia, Lvsitania Romana, Lvporvm Celtiberiae Levkoni y Emeritae Lvdvs Gladiatorum, además de otras de recreación romana de diferentes puntos del territorio nacional. Para la jornada de hoy, la última de este evento cultural, se llevaran a cabo talleres, cocina romana en vivo y la singular pasarela romana en el templo de Diana: del clasicismo a la evocación romántica.