Ultimos pasos para la mejora de la red de abastecimiento de agua. El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, y el director de Acuaes en Extremadura, Emilio del Pozo, firmaron ayer el acta de recepción de la obra de la nueva planta potabilizadora, que junto con el anillo perimetral de agua permitirá mejorar el suministro a 100.000 habitantes de Mérida y la comarca. La inversión en la planta ha sido de 4,3 millones de euros y una vez que comience a funcionar se conseguirá una presión de agua «similar» en toda la ciudad.

Los trabajos han consistido en la ampliación de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (Etap) de Mérida, que incrementa su capacidad de tratamiento de 450 a 600 litros de agua por segundo. La instalación, que usará un novedoso sistema con ozono y carbón activo para tratar el agua, dispondrá de todos los procesos necesarios para el cumplimiento de la normativa comunitaria en materia de calidad. Ahora, el ayuntamiento recepciona la obra de Acuaes (sociedad estatal Aguas de las Cuencas de España, dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente) para comenzar su explotación.

Según explicó ayer el ayuntamiento, la obsoleta red de abastecimiento con la que cuenta Mérida, unido a la falta de presión y capacidad de cara al crecimiento futuro de la ciudad, aconsejaban la realización de una nueva Etap junto al anillo exterior al que se conectarán los municipios de la comarca con problemas de abastecimiento. En total, la inversión prevista para la mejora de la red de suministro es de 25,8 millones de euros. «Esto permitirá que todos los vecinos tengan una presión de agua suficiente, cosa que se hará ahora de forma paulatina entre Aqualia y el ayuntamiento», dijo el alcalde.

Por su parte, el director de Acuaes en Extremadura, Emilio del Pozo, explicó que el tratamiento con ozono «dará mucha mayor calidad al agua y una seguridad para la salud mucho mejor que la que daba el cloro tradicional».

El siguiente paso será dar presión a todas las zonas de la ciudad, lo que se hará «de forma paulatina» para evitar la rotura de las tuberías más antiguas. Según las previsiones de Osuna, podría ser en seis meses, iniciándose la actuación en la zona norte, «que es una obra más fácil de hacer». El alcalde precisó que después de la obra del anillo se podrán llevar a cabo otras actuaciones como el saneamiento de Proserpina, que se financiaría con fondos europeos. H