El representante de la asociación ecologista Adenex en la comisión ejecutiva del Consorcio de la Ciudad Monumental, Emilio Olivas, solicitó en la última reunión de este organismo la supresión de los elementos arquitectónicos que se añadieron al templo de Diana en los años 80, que los califica de "irrespetuosos y falsos, desvirtúan el edificio y confunden a estudiosos y turistas", afirmó.

Además, señala que la restauración que se realizó fue "más formal que arqueológica y contraria a la ley de patrimonio, y da una imagen del templo que no es auténtica ni rigurosa".

BELLAS ARTES La restauración que critica Emilio Olivas la hizo la Dirección General de Bellas Artes. Los trabajos consistieron en colocar un frontón semicircular y en alargar con molduras las columnas necesarias para sujetarlo. "Ya nos opusimos en su momento y ahora nos sigue pareciendo ofensiva esa restauración", indicó.

El Consorcio dijo que estudiarán si es factible retirar estos elementos del monumento e incluirlo en el proyecto de remodelación del templo de Diana.

Olivas dio a conocer esta propuesta durante la presentación de la Consejería de Cultura de la convocatoria del concurso para redactar el proyecto de la remodelación de templo de Diana, que prevé crear una gran plaza y tapar las medianeras con la construcción de un edificio de dos pisos de altura con un volumen similar al del monumento, que albergará tiendas. Así, se creará una gran centro que será un punto de encuentro turístico, social y comercial.

Una de las propuestas que se hará a los industriales que deseen instalarse en la zona será la de financiar el proyecto a través de un crédito que se pagará posteriormente con los beneficios económicos que se vayan produciendo.

ARQUITECTURA RELIGIOSA Este monumento es el edificio más majestuoso de la arquitectura religiosa romana de Mérida, que ha perdurado en la ciudad en un buen estado gracias, entre otros motivos, a su continua reutilización a lo largo de los siglos. Su construcción debió realizarse a finales del siglo I a. C. o principios del siglo I d. C., pocos años después de la fundación de Emerita Augusta, y se trata de un templo destinado al culto imperial.

Por otra parte, Olivas solicitó a los representantes del ayuntamiento en el Consorcio que hagan cumplir la normativa en Disciplina Urbanística en las fachadas de los edificios. El objetivo de esta queja es que se unifiquen los criterios para que haya armonía en los carteles.