El hospital psiquiátrico trata en la actualidad a enfermos que llevan ingresados más de sesenta años al no tener ningún miembro familiar que pueda hacerse cargo de ellos. El vínculo familiar es "imprescindible" para la recuperación de estas personas, según explicó a EL PERIODICO EXTREMADURA el gerente del centro, Manuel Grandal, que señaló que en el psiquiátrico "hay enfermos con 90 años, que están ingresados desde el año cuarenta, que no tienen familia".

El centro tiene una estancia media de 16 días en las unidades de Agudos; en la Unidad de Media Estancia, la media es de nueve meses; y para la Unidad de Psicogeriátrica y la de Retrasos Mentales hay varios años de estancia, que es donde están los enfermos que llevan más tiempo internos.

Ante esta circunstancia, Grandal reiteró que el lugar en el que deben permanecer estas personas "es en su propio medio social, familia o comunidad, porque en el hospital no se genera afecto, nosotros prestamos unos servicios, pero no podemos cubrir las necesidades completas y hay que obligar a las familias a que no se olviden de sus familiares enfermos". Pasados los períodos de estancias medias en cada caso, destacó, "no se debe tener a los enfermos, porque pierden el apego".

Es tal la necesidad del entorno familiar, aseguró, que "los enfermos que tienen mayores vínculos familiares, son los que mejor están". El hospital, dijo, "debe ser un recurso intermedio entre la sociedad y el enfermo". Por ello, indicó que su mayor preocupación es "qué pasa con los enfermos de 20, 30 y 40 años de edad, que no deben estar toda la vida aquí, como pasa con estos enfermos que llevan más de cincuenta años".

El gerente del centro insistió en que, aunque los enfermos no tengan familiares, "a veces tenemos gente en la comunidad que los tienen perfectamente admitidos, y no pasa nada".