Los vecinos de la zona centro han mostrado sus quejas ante lo que consideran un "exceso de ruido" provocado por la masiva presencia de jóvenes en la ciudad debido al festival de teatro grecolatino. Esos jóvenes --está prevista la asistencia de más de 15.000 esta semana-- se dejan notar en las calles sobre todo al mediodía y por la tarde, y llenan algunos bares y locales de copas abiertos desde por la mañana para aprovechar la ocasión.

Este es el motivo principal de denuncia de la Asociación en Defensa de los Afectados por el Ruido (Aedar) de Mérida, cuya presidenta, Maribel Fernández, manifestó ayer a este periódico la necesidad de contar con presencia policial permanente ante la aglomeración de jóvenes en las calles de la zona centro.

El festival, organizado por el instituto Santa Eulalia, termina hoy después de cuatro días de representaciones teatrales, y Aedar lamenta la escasa previsión para este evento en particular y para el ocio juvenil en general, porque "el ayuntamiento no se ha preocupado jamás de albergar alguna zona para jóvenes".

Las consecuencias, indicó Fernández, son la "suciedad y el ruido de bares y discotecas". A este respecto, destacó que la asociación tiene abiertos en los juzgados dos contenciosos contra 21 locales de copas.