Ante la proximidad de los Carnavales, desde la Unión de Consumidores de Extremadura recuerdan que los disfraces deben cumplir con la legislación en materia de seguridad de juguetes, al ser productos dirigidos a menores de 14 años. El incumplimiento de esta normativa, que puede poner en riesgo la salud de los pequeños, ha provocado la retirada de casi 280 referencias de disfraces en nuestro país en los últimos años.

En general, los incumplimientos más frecuentes en el etiquetado son: Ausencia de advertencias de uso en castellano. Ausencia del marcado CE, que certifica que el disfraz ha sido fabricado respetando las normas de calidad y seguridad de la Unión Europea. En caso de disfraces dirigidos a mayores de 3 años, debe incluirse el símbolo que indica que no debe ser utilizado por menores de 36 meses. Faltan datos del importador o fabricante, sobre todo su dirección.

Más graves aún son los incumplimientos de las normas de seguridad. Durante muchos años, los cordones presentes en la zona del cuello o la cabeza han provocado accidentes muy serios en toda la UE. A raíz de estos problemas, se dictaron varias normas que prohíben, en las prendas dirigidas a menores de siete años, la existencia de cuerdas corredizas, cordones funcionales o decorativos en la zona de la cabeza y el cuello.

Los cosméticos deben incluir en su etiquetado el nombre del producto, el del responsable (o fabricante o importador, incluida su dirección), la fecha mínima de caducidad, el número de lote y los componentes.