TEtsperemos que el apoyo de Aznar a Rajoy , en el discurso con el que el expresidente inauguró la Convención Nacional del PP, no tenga los mismos efectos que sus recientes declaraciones de respaldo al candidato a la Presidencia de México, Felipe Calderón .
El candidato del PAN, un PP a la mexicana, ha reconocido públicamente que el apoyo de Aznar ha tenido efectos negativos en su campaña. Además, ha jurado por el pato Donald que la ocurrencia de invitar al expresidente español no fue suya sino del prócer de su partido, Manuel Espino , con el que además no está en muy buenas relaciones. "Aunque los platos rotos por las declaraciones de Aznar los he pagado yo", añadió Calderón.
Al expresidente no le salen bien las cosas de un tiempo a esta parte. En su último encuentro con George Bush , se mostró quejoso por la carta de Condolezza Rice a Zapatero en la que la poderosa secretaria de Estado norteamericana apoyaba y anunciaba su disposición a financiar la Alianza de Civilizaciones apadrinada por el presidente del Gobierno español. "Esto no se le hace a un amigo, George", comentó Aznar, que siempre calificó de "estupidez" la iniciativa de Zapatero, mientras el amigo George se hizo de nuevas. Es el chascarrillo más celebrado estos días en ambientes próximos al PSOE.
Mientras este sábado los medios de comunicación airean el discurso de Aznar ante la gran asamblea del PP, a la busca del centro perdido, en la factoría socialista no paran de producir documentación comparativa con tramos y situaciones equiparables entre el actual Gobierno y los Gobiernos del PP.
La última plantilla utilizada se refiere al control parlamentario, después de las acusaciones del PP sobre una supuesta tendencia de Zapatero a ningunear al Congreso. Las cuentas arrojan un total de 11 comparecencias y 60 preguntas orales para Aznar en los primeros dos años de legislatura del PP, mientras que Zapatero, en estos dos primeros años de la presente legislatura, ya ha comparecido 23 veces y ha respondido a 113 preguntas orales.
Pero las comparativas que dejan en peor lugar a Aznar son las muy aireadas estos días sobre política antiterrorista, empezando por su disposición a alfombrar a ETA el camino hacia la paz: "Sabré ser generoso", decía por si la banda anunciaba una tregua, en vísperas de la negociación autorizada por el propio Aznar a finales del 98. Por no recordar a los 64 etarras con condenas centenarias que, sin haber cumplido ni 20 años de cárcel, salieron a calle durante la etapa de los gobiernos del PP.
*Periodista
