El Congreso no investigará el papel de España en la guerra de Irak, al no prosperar en la Comisión de Exteriores una propuesta de ERC que pedía la constitución de una «comisión de evaluación» sobre este asunto, con la intención de dejar en evidencia al expresidente del Gobierno José María Aznar, al estilo del informe Chilcot en el Reino Unido. Tras un trabajo riguroso y exhaustivo de una comisión, el informe Chilcot criticó la actuación del exprimer ministro Tony Blair, determinó que Sadam Husein no poseía armas de destrucción masiva, como se había dicho para justificar la guerra, y concluyó que la intervención en Irak fue innecesaria. Pese a que, merced a una enmienda del PSOE, la pretensión de ERC había quedado rebajada a la elaboración de un informe por parte del Gobierno, la iniciativa no salió adelante al producirse un empate en la comisión. Votaron a favor ERC, PSOE, Podemos y PDEC (la antigua CDC), mientras que se opusieron el PP, Ciudadanos y UPN. La ausencia del PNV contribuyó al empate, que frena una investigación necesaria y conveniente. Hay que recordar que de los tres integrantes de la foto de las Azores, el único que no ha pedido perdón ni ha admitido que estaba equivocado ha sido Aznar. La votación reproduce el pacto de la investidura y deja en mal lugar a Ciudadanos, que habla mucho de regeneración pero cuya actuación contradice sus palabras. La regeneración no solo debe afectar a la corrupción, y este era un buen momento para demostrarlo.