Aveces pienso que los humanos somos parte de un experimento realizado por un ser superior. Me explico: Un ente celestial o intergaláctico con poderes inimaginables ha creado este planeta llamado Tierra y ha metido en él a seres de distintos tipos e inteligencias para comprobar qué ocurre. Por un lado los vegetales, inmóviles sobre el terreno e incapaces de emitir sonidos por sí mismos. Se supone que su función en el experimento es servir de elemento destinado a proporcionar la sobrevivencia de los animales, móviles y capaces de trasmitir sonidos. Entre los animales existen dos especies, unos tontos, conocidos como irracionales y otros listos, conocidos como humanos. Y aquí es a donde yo quiero llegar. Me da la impresión de que un ser súper poderoso en un momento de aburrimiento debió pensar: «Voy a probar qué ocurre si meto en un mismo sitio a unos tíos muy listos conviviendo con unos tíos muy tontos entre cosas que crecen pero ni sienten ni padecen. A ver hasta dónde son capaces de llegar».

De manera que estamos mezclados vegetales, animales y humanos para satisfacer la curiosidad de un ‘científico celestial’. ¿Y qué ha ocurrido? Pues ya ven, que a lo largo de los años de humanidad no hemos hecho otra cosa que putearnos unos humanos a otros y hacer la puñeta en lo máximo posible a los animales irracionales, y ya de paso cargarnos gran parte del hábitat de los seres vegetales. El «científico celestial» se lo debe estar pasando pipa con nosotros. Pensará: «Hago inteligentes a estos tíos para que puedan sobrevivir plácidamente y por lo largo de los años en el paraíso terrenal, y ellos se comportan como cafres tan sumamente tontos que lo están destrozando todo poco a poco».

Pero creo que en realidad este ‘científico celestial’ tiene bastante mala leche, porque no quiere extraer la astucia de la inteligencia. A mi modo de ver, si hemos llegado a este punto de deterioro del mundo, no ha sido por culpa de los inteligentes, sino de los astutos.

El asunto es que muas veces no sabemos distinguir al humano astuto del inteligente. Y mientras esto ocurra, el ‘científico celestial’ seguirá divirtiéndose un montón con su experimento.

* Pintor