WLw a decisión de Izquierda Unida de presentar una enmienda a la totalidad del Proyecto de Presupuesto del 2012 presentado por la Junta, supone la primera decisión de oposición a José Antonio Monago por parte de la coalición desde la abstención que le sirvió para acceder al gobierno de la comunidad. Se trata de una decisión que es consecuencia de la presión de los 8 críticos que el domingo presentaron su dimisión de la Presidencia de IU precisamente porque entendían que su partido estaba siendo "la muleta del PP". Es, por tanto, una victoria de estos y una censura a la labor de los tres parlamentarios, que hasta el jueves barajaban presentar solo enmiendas parciales al proyecto de los populares. Que esa nueva posición de IU tenga continuidad o no es difícil de prever, mucho menos con los antecedentes de cambio de criterio habidos en el grupo de Pedro Escobar, pero sí anuncia que las reglas del juego que se habían asentado desde la investidura se han movido y que se observa un escenario más incierto.
Otra cosa es que la enmienda a la totalidad tenga efectos de calado. No lo parece, habida cuenta de que la presentación de otra por parte del PSOE, que la presenta esta mañana, parece alejar cualquier atisbo de frente común entre ambas fuerzas. Todo indica que ambas enmiendas serán rechazadas y que el Proyecto de Presupuestos entrará en una fase de negociación capítulo por capítulo. No hay que alarmarse. Es la política. Monago ya ha dicho que hablará con los dos grupos de oposición para aprobar las cuentas. Lo normal en una situación parlamentaria sin mayoría absoluta.
