WPwoco a poco, el Estado de derecho está recuperándose de las violaciones a las que ha sido sometido en países democráticos en aras de la lucha contra el terrorismo internacional. El dictamen adoptado por los jueces lores del Reino Unido, que considera inadmisible en los tribunales británicos el uso de pruebas obtenidas bajo tortura, además de asestar un duro revés a la política antiterrorista de Tony Blair , recuerda que este tipo de violencia es una maldad incalificable, que nunca puede estar justificada, y que además debe ser castigada.

El fallo de los siete jueces de la Cámara de los Lores, constituidos en última instancia judicial del país, llega en el momento en que el Gobierno de Estados Unidos, por boca de su secretaria de Estado Condoleezza Rice , ha tenido que salir al paso --aunque sin ningún argumento convincente-- del escándalo levantado en varios países de la Unión Europea por el supuesto tratamiento ilegal dado a presuntos islamistas detenidos en cárceles secretas.

Los jueces lores han venido a recordar un principio tan fundamental en el Estado de derecho como es el de que la ley ampara a todos por igual y que no se pueden hacer distinciones en función de los fines.