Esta primavera atronadora se puede ir, o volver a ver y sentir, en el recinto ajardinado de los Pedrilla, la casa museo Oswaldo Guayasamín, ecuatoriano, nacido en 1919, monumental artista hispanoamericano, tan expresionista como innovador, de temática indigenista, con su artesanía y orfebrería, que trabajó para su pueblo y para el mundo.

«He pintado», decía como si gritara la humillación y la angustia de este tiempo.

Desde 1995 también se contempla la sala donde impartía clases y sus talleres en esta ciudad.

El alemán Vostell, en los Barruecos, creó el Museo Vostell de Malpartida, parajes, obras, exposiciones mútiplés, conciertos, experiencias, a finales del siglo pasado, edificaciones lugareñas transformadas en sugerentes caserones artísticos. Entorno cultural total.

A principios del siglo XXI, la galerista y coleccionista Helga de Alvear, nacida en Renania, decide instalar aquí el Centro de Artes Visuales, colección de arte privado inacabable.

Situado en la calle Pizarro, esta dama abrió, dichosamente, las puertas, los ojos y el corazón de la infinita sorpresa del talento del creador.

El gobierno, ayuntamiento, diputación, universidad y caja de ahorros han hecho posible unas maravillosas mañanas de museos por Cáceres y sus alrededores.

FRONTERAS PARA POBRES

Pobres con fronteras

Pedro Serrano

Valladolid

Estimados emigrantes: Quiero que sepáis que vuestro colega, el emigrante maliense Mamoudou Gassama, os ha puesto el listón muy alto para conseguir la nacionalidad en algún país europeo.

El récord, a partir de ahora, está en escalar cuatro pisos en treinta segundos y realizar un acto heroico como, por ejemplo en este caso, salvar una vida.

Los «sin papeles» no podéis venir a Europa así como así y pedir que os regularicen por las buenas. Eso sí, si tenéis papeles, es decir muchos billetes, la cosa cambia.

Y, por supuesto, solamente en ese caso, no solo seréis nacionalizados de inmediato, sino que seréis bienvenidos y recibos con todos los honores y facilidades que se merecen los «con muchos papeles».

Así es la vida de cruel y despiadada con los desheredados, amigos míos. Vosotros, simplemente, habéis tenido mala suerte. Qué le vamos a hacer.

Precisamente, las fronteras se inventaron para vosotros, los enfermos de penuria.

Y os recuerdo que, desde el principio de los tiempos, la diosa Fortuna nunca ha estado de vuestro lado, sino de los «ricos sin fronteras».

MOCIÓN DE CENSURA

Frankenstein constitucional o Drácula amoral

Miguel Fernández-Palacios Gordon

Madrid

Que yo sepa es el Partido Popular quien, amparando la corrupción, ha llevado a España a este callejón sin salida. Y ahora, en lugar de abochornarse, atacan a quienes usando una herramienta constitucional y legítima, pretenden una alternativa democrática al saqueo establecido que lo apee del poder para higienizar el país.

Con rabia, se burlan diciendo que la alternativa será un «Gobierno Frankenstein».

¿Acaso Rajoy no es el presidente de un Gobierno Drácula, aquel que chupa toda la sangre de la gente corriente -a los poderosos ni los rozan- para montar un sistema institucionalizado de corrupción, caja B incluida, cuya cúpula financiera es juzgada como organización criminal, que ha defraudado a la Hacienda pública, podrido todas las instituciones, embarrado la convivencia ciudadana y, para tapar sus escándalos, dado alas al independentismo?