Además de los tradicionales inconvenientes y trabas que asedian e incluso asfixian, a los jóvenes en materias como el empleo, la vivienda, la emancipación o la educación, hay otros problemas que están cobrando un mayor protagonismo durante los últimos años y son los relacionados con la sanidad. La salud de los jóvenes se ha visto invadida por varios aspectos, que lejos de ir mejorando y solucionándose con el tiempo, siguen empeorando a pasos agigantados. Estos problemas podemos dividirlos en tres ramas: en primer lugar, los relacionados con la sexualidad; en segundo lugar, los relacionados con el consumo de alcohol, drogas y sustancias estupefacientes; y en tercer lugar, los relacionados con los trastornos alimenticios.

Respecto al primer problema sanitario, cabe destacar que el número de embarazos no deseados entre chicas jóvenes, menores y adolescentes se ha multiplicado por cinco en los últimos diez años en nuestro país. De ellas, una gran parte decide acudir a la interrupción voluntaria del embarazo, es decir, optan por el aborto como solución in extremis. Es lamentable, pero he llegado a escuchar a alguna chica definiendo al aborto como un método anticonceptivo más. Y digo que es triste porque no entiendo como desde las familias y desde las aulas, no se ofrece la información oportuna a estas adolescentes. Y es que algo está fallando, las cifras hablan por sí solas y en este caso son impactantes. Según el Instituto de Política Familiar, en el año 2010, uno de cada cinco embarazos terminará en aborto en nuestro país. España es la nación europea donde más se han incrementado el número de abortos en la última década, seguidos de Bélgica y Holanda. Hay que reseñar que un 96,7% de los casos de abortos que se vienen practicando, se amparan en la condición de que el embarazo puede producir un riesgo para la salud psíquica de la madre-

XPERO ESTEx no es el único problema, cada lunes las puertas de los centros de Planificación Familiar se llenan de chicas jóvenes que acuden a tomarse la píldora postcoital, (píldora del día después) como si fuera un método anticonceptivo más. Estas jóvenes desconocen por completo, en muchos de los casos, los efectos perniciosos y secundarios que puede traer consigo el abuso constante y reiterado de esta píldora. Los expertos apuntan que la píldora postcoital es un remedio de "emergencia y que solo debería de usarse en casos puntuales", no semanalmente o cada dos o tres días.

En lo que respecta a la segunda rama, el consumo de alcohol y drogas también se han erigido como problemas graves. Según los datos del Ministerio de Sanidad, cada vez los jóvenes españoles comienzan a beber antes y además lo hacen en mayor cantidad. En estos momentos, la edad media de inicio en el alcohol en la región está en los 13,5 años. Respecto a la droga ha habido cambios, la cocaína y las sustancias estupefacientes de diseño se han impuesto a la heroína. Cada vez están más presentes en nuestras calles, institutos, discotecas, parques. Según un informe de la Agencia Antidroga de EEUU, España es el país de la Unión Europea con el mayor consumo de cocaína importada desde Colombia. La Agencia calcula que 562.000 españoles toman cocaína con cierta regularidad. En dicho informe, se afirma igualmente que los españoles somos los terceros de la Unión Europea en consumo de anfetaminas y los segundos en el de hachís.

Por último, respecto al tercer problema, cabe destacar que los trastornos alimenticios también afectan a una gran parte de la juventud española y extremeña. La anorexia, la bulimia y la obesidad están más cerca de lo que pensamos. Se considera que los desórdenes alimenticios se producen, de un lado, por la tendencia creciente a consumir comida rápida, por la despreocupación de algunos padres por el tipo de alimentación que llevan sus hijos, y por otro lado, debido también a la presión social y cultural que ejercen determinados valores. Los modernos y desvirtuados cánones de belleza basados en la delgadez extrema han hecho estragos entre la juventud.

La salud y el bienestar constituyen un derecho fundamental del ser humano. Proteger y promover la salud y el bienestar de niños, jóvenes y adolescentes, es algo fundamental para el futuro de la sociedad. Adoptar la postura del avestruz ante los problemas, mirar para otro lado, actuar a posteriori en vez de a priori y esperar que las trabas y amenazas se resuelvan solas, no son las soluciones más idóneas. Frente a la gran mayoría de los problemas que afectan a la salud de los jóvenes, la mejor medicina es la prevención . Deben incrementarse las inversiones en materia preventiva por parte del sector sanitario. Hay que invertir en programas informativos, en programas continuos de concienciación respecto a la sexualidad, respecto al consumo de drogas y alcohol, y respecto a los trastornos alimenticios. Debemos actuar sin más dilación desde las familias, desde las aulas, desde la Administración, desde los lugares de ocio y encuentro de jóvenes. Abramos los ojos y cojamos el toro por los cuernos, con la salud no se juega.

*Presidente regional de NNGG ydiputado autonómico del PP