DOCENTES

Oposiciones

Rubén Dorado Murillo

Badajoz

Con motivo de la inminente publicación de la normativa que regirá el proceso de oposición para la selección de profesorado, causa pena y desolación escuchar directamente de dirigentes sindicales que hay que modular a la baja la valoración del expediente académico de los aspirantes, que no se puede permitir que los aspirantes con buen expediente superen al resto porque decantaría demasiado el proceso. ¿Qué nos pasa? Forges acierta al escribir que "mediocre es un país que ha permitido, fomentado y celebrado el triunfo de los mediocres, arrinconando la excelencia". Es normal que los ciudadanos nos sintamos cada día más lejos de la clase política y sindical.

No hace no mucho tiempo un diario de tirada nacional publicaba un estudio de un psicólogo escolar español donde se afirmaba que una de las principales diferencias entre el éxito escolar en España y Finlandia estribaba en la selección del profesorado. Allí se prima la elevada cualificación académica del profesorado. La educación de los jóvenes es considerada un tesoro y se deja en manos de los mejores profesionales del país. Para ser maestro se necesita una alta cualificación en el historial académico.

Nos bombardean con noticias sobre la elevada tasa de fracaso escolar y nos atosigan con la mejora de la calidad educativa.

ACLARACION

Mago de Oz N

Damián Galán

En la crítica aparecida en su periódico sobre el Mago de Oz, aparezco como responsable de la escenografía. Unicamente comentarle que no soy el autor y que por error, ya subsanado, figura mi nombre en el programa de mano. Le estaría muy agradecido si pudiera corregir este malentendido, en absoluto achacable a su publicación ni al autor de la crítica.

EN CACERES

Párking de Valhondo

Dom Perdigón

Crear esa zona fue una buena idea para evitar que las caravanas de los turistas que van de paso aparcaran en las calles céntricas y de paso ofrecerles un recinto digno con unos servicios mínimos. Pero si es cierto lo que afirma el ayuntamiento y el objetivo se ha desvirtuado, sirviendo como recinto campista fijo, abusando de unos servicios gratuitos que pagamos todos los cacereños, me parece acertado que se adopten medidas disuasorias. Para estancias más o menos duraderas ya existe el cámping --de pago, naturalmente-- del mismo modo que el resto de visitantes se alojan en hostales y hoteles. ¿Qué beneficio reporta a la ciudad un turismo que disfruta de unas instalaciones gratuitas y se cocina la tortilla de patatas en su propia caravana? La propuesta de mantener las actuales dotaciones e incluso aumentarlas con servicio de vigilancia 24 horas (por ejemplo), lo que podría crear algún puesto de trabajo, es magnífica, aunque me temo que en ese caso los responsables del cámping sí pondrían el grito en el cielo por competencia desleal y con razón. Pero siempre existen soluciones intermedias.