La subdelegada del Gobierno en Badajoz, Pilar Nogales, ha puesto en valor el oficio de la alfarería para combatir la despoblación rural que se produce en determinadas comarcas de Extremadura, lo que supone uno de los grandes retos a afrontar por parte de todas las administraciones.

Así lo ha expresado en la inauguración de la XIV Feria Ibérica de la Alfarería y el Barro, que se celebra este año en Salvatierra de los Barros, un certamen que cuenta con numerosas actividades hasta el domingo y en el que también participan una veintena artesanos de la localidad portuguesa de San Pedro do Corval.

«La vuestra no es una feria cualquiera porque va más allá de la actividad comercial, con casi medio centenar de expositores -21 portugueses- al ponerse en valor el eje vertebrador que une a ambos municipios: la alfarería, verdadera seña de identidad histórica de ambas poblaciones», ha destacado Pilar Nogales.

La subdelegada ha puesto en valor el esfuerzo de las administraciones, en especial del ayuntamiento, por mantener e impulsar esta Feria que se celebra alternativamente en Salvatierra y en San Pedro do Corval: «El objetivo prioritario es mantener esta tradición de la que tanto nos sentimos orgullosos y que distingue a Salvatierra de los Barros como verdadera capital de la Alfarería de toda España, con un alto nivel de exportación de la producción artesanal a Europa y América».

Sin embargo, también ha advertido de que no es ajena a los problemas que padece esta tradición, que tiene sus raíces datadas al menos en la Edad Media. Entre ellas está la dificultad para un relevo generacional óptimo que asegure la continuidad del oficio de alfarero. «Por eso, las administraciones, todas, debemos de apoyaros, cada una desde su nivel de competencias, para que esta tradición no sólo continúe viva sino que evolucione dentro de un mercado global cada vez más cambiante, y donde, por ejemplo, las nuevas tecnologías están marcando las reglas del juego».