Tras 8 años como portavoz de la oposición, Bernardino Píriz (PP) accedió a la alcaldía de Olivenza con 29 años y dispuesto a gobernar "de otra manera". Tras dos años al frente del ayuntamiento, hace balance sin dejar de mirar a un futuro que afronta con optimismo y proyectos.

-- ¿Qué balance hace en el ecuador de la legislatura?

--En algunos aspectos es muy positivo y en otros, no tanto. El cambio no es fácil y la responsabilidad es doble, porque sustituir a un gobierno de 32 años del mismo color político es bastante difícil, no solo en la adaptación del pueblo, sino del propio personal municipal. Pero en este sentido, estamos contentos, porque se ha hecho con normalidad y tranquilidad. La espinita que nos queda clavada es el desempleo, que nos preocupa mucho.

--En su programa electoral, recogía el turismo como eje fundamental para la creación de empleo. ¿Qué se ha hecho hasta ahora y qué queda por hacer?

--En materia de turismo, el trabajo del equipo de gobierno creo que se podría calificar como sobresaliente. No porque lo diga yo, sino por lo dicen los números: la última Semana Santa se han incrementado las visitas a la oficina de turismo un 20% y ha habido una ocupación hotelera del 100%. Desde el principio de legislatura hemos intentado que el turismo sea un referente y creo que lo hemos conseguido: ha habido gran presencia en los medios de comunicación con la Feria del Toro, se ha logrado el premio al Mejor Rincón de España 2012 para la Iglesia de la Magdalena y se ha puesto en marcha una iniciativa novedosa como Olivenza Despierta , abriendo los monumentos de noche. También hemos intentado conseguir diversos distintivos de calidad turística y así ha sido para la Policía Local y para los dos iglesias y se ha dado un impulso al Museo Etnográfico, donde las visitas se han incrementado un 50%. Estamos haciendo un esfuerzo constante para atraer turismo y apostando por actividades que ponen a Olivenza en el mapa, como los conciertos de Manolo García y Pablo Alborán, congresos y concentraciones. También hemos hablado con los hosteleros para que entre todos mejoremos la atención y lograr que nuestra tarjeta de visita sean los propios turistas, que luego atraigan a muchos más.

--¿Y de cara a Portugal?

--Hemos llevado a cabo un trabajo constante con nuestros vecinos, porque Olivenza había perdido el turismo portugués y se está recuperando.

--¿Qué proyectos tiene para los dos próximos años en Olivenza y sus pedanías?

--Siempre he dicho que necesitábamos paciencia y tiempo para recoger los frutos de las políticas que se habían puesto en marcha. A partir de junio, durante seis meses saldremos en la prensa con muy buenas noticias. En mayo presentaré una iniciativa pionera en dos de las pedanías, en San Francisco y San Rafael, con la venta de solares públicos a bajo precio para que los jóvenes se puedan hacer sus viviendas y crear empleo con su construcción. Al mismo tiempo, estamos haciendo un plan de inversiones de obra para que todas las pedanías puedan tener los servicios que necesitan y vamos a favorecer que el turismo llegue hasta ellas, aprovechando el cámping. En Olivenza, quedan pendiente grandes objetivos. El primero es la apertura ya mismo del matadero municipal, que generará empleos directos e indirectos y se pondrá en marcha otra de las grandes apuestas del equipo de gobierno para esta legislatura: el embarcadero de Villareal. Además, hemos apostado mucho por algunas empresas que se están instalando en el polígono industrial, que generarán puestos de trabajo. En menos de dos años, hemos cumplido el 75% del programa electoral y en lo que nos queda vamos a transformar por completo Olivenza: en seis o diez meses se empezarán a ver los cambios. Es una transformación positiva y, si no se tuerce nada, el final de año será magnífico con creación de empleo, que es lo más importante.

--Existía un plan para alquilar viviendas vacías a familias con escasos recursos tras aprobar en pleno una moción de IU, pero finalmente se descartó. ¿Por qué?

--El tema de la moción ha dado mucho que hablar y ha sido un poco confuso. La moción de IU era el seguimiento a una propuesta del equipo de gobierno, pero pedía que los propietarios las cedieran al ayuntamiento y eso era inviable. Lo que sí teníamos en mente es rehabilitar algunas viviendas de la Santa Casa de Misericordia para las familias que peor lo están pasando, a cuya disposición pondremos 6 casas de inmediato. Además, para que los jóvenes no se marchen del pueblo se están construyendo, a través del Gobierno de Extremadura, cerca de 30 viviendas adosadas a un precio económico. Lo que queremos es que Olivenza no fuera esa ciudad dormitorio de la que muchas veces se nos acusaba y de ahí que busquemos esa transformación para ser una ciudad que compita con Elvas y Badajoz, porque tenemos capacidad para no convertirnos en segundones.

--Una de las actuaciones más reclamadas por los vecinos era la conversión en autovía de la carretera Badajoz-Olivenza. ¿Sigue siendo una prioridad?

-- El desdoblamiento fue lo primero que pedí al presidente del Gobierno de Extremadura y al consejero de Fomento. Me contestan que no es el momento, pero todo el mundo es consciente de que es necesario y por eso mantengo la reivindicación. Quiero que seamos los primeros cuando haya dinero para hacer estas inversiones.

--¿Cuál es su relación con la oposición?

--Aunque políticamente no sea correcto lo que voy a decir, prefiero ser sincero. La relación está siendo muy complicada. El resultado electoral fue muy ajustado y tienen la mente en las próximas elecciones, pero en este momento lo que nos reclaman los ciudadanos es que trabajemos juntos para resolver los problemas de la ciudad y, por eso, siempre les he dicho que deben comportarse con más responsabilidad.