El alcalde José Blázquez, catalogó ayer "de auténtica vergüenza", que al final tengan que ser las arcas municipales "las que apechuguen" con el arreglo de la carretera que une el monasterio de Yuste con Garganta la Olla, al ser muy usada por los turistas y para el transporte de productos agrícolas.

Blázquez calificó su estado de "realmente calamitoso, lleno de tramos con el asfalto deteriorado y baches", cuyo número ha aumentado considerablemente debido a las lluvias.

El alcalde también recordó que perteneció al antiguo Iryda "y ahora parece ser que es de los ayuntamientos de Cuacos y Garganta, si bien el tramo realmente deteriorado está Garganta".

De otro lado, indicó que otras carreteras, "de esta misma comarca", que se encontraban en una situación idéntica, "como la que va de Tejeda a Valdeíñigos, han sido reparadas por la Junta, por lo que se pregunta ¿Por qué la de Garganta a Yuste no puede ser arreglada con cargo al presupuesto regional?".