El alcalde de Malpartida de Cáceres, Antonio Jiménez, pidió ayer a la Junta de Extremadura "mayor voluntad política" en lo que concierne a los servicios destinados para los mayores en el municipio. Jiménez explicó que la localidad fue una de las primeras en contar con pisos tutelados, pero "ahora somos los últimos en tener una residencia de ancianos". El alcalde confió en que, en breve, se inicie la segunda fase de la construcción del centro, que consistirá en la creación de la cubierta, fachada, tabiques, suelo e instalaciones de electricidad, fontanería y calefacción con 120.000 euros aportados por la Junta y el ayuntamiento. Además, anunció que la pretensión final es ampliar el centro de día con una residencia de ancianos y ubicar ambos servicios en un solar de 8.000 metros cuadrados frente al campo de fútbol.

DEMANDA Para la residencia ya hay una demanda de 100 mayores, pero el alcalde dijo que el centro "no se masificará y tendrá 30 o 40 plazas en régimen interno". Se ofrecerán servicios de lavandería, comida y atención a enfermos de alzheimer.

Otro plan del ayuntamiento es trasladar el actual hogar del pensionista "que es muy pequeño", según Jiménez, junto al futuro centro de día y residencia de ancianos, "Crearemos una zona de centros comunes para los mayores". Las antiguas escuelas, donde ahora está el hogar, se convertirán en un albergue municipal de ocho habitaciones y cocina.