La ciudad celebra en estos días sus fiestas patronales más atípicas, centradas, únicamente, en los actos religiosos, que son los que, por el momento, han sobrevivido a los azotes de la crisis sanitaria.

De esta manera, el programa cultural, deportivo y taurino, ha quedado suspendido o adaptado a la situación actual, tal y como pasará esta mañana con la tradicional intervención de las marionetas de Pepito y sus amigos, que cada año reúnen a cientos de niños y adultos, que en esta ocasión tendrán que disfrutar del espectáculo a través de los medios de comunicación locales.

Así lo han sugerido Jorge Bermejo, padre e hijo, creadores de la compañía trujillana, que ha querido hacer este regalo a los más pequeños de la ciudad.

Teniendo en cuenta que las restricciones de aforo no permiten llevar a cabo la representación al aire libre, los responsables han propuesto al ayuntamiento realizar la función a puerta cerrada, en el teatro, para que los medios puedan difundirla en estos días.

«Este año alcanzamos nuestro 20 aniversario y dadas las circunstancias, no íbamos a poder celebrarlo como nos gustaría, por eso, hemos querido llegar al público a través de los medios, algo necesario en días en los que priman las malas noticias», han señalado.

Enrique Borrega, concejal de Cultura y Festejos del Ayuntamiento de Trujillo, ha apoyado esta iniciativa y se ha mostrado agradecido por la idea de los artistas trujillanos. «Es una buena manera de seguir la tradición manteniendo la seguridad», ha dicho.