El número de personas afectadas por la gripe aviaria sigue creciendo en Turquía. Ayer se confirmaron cinco casos más, lo que eleva la cifra de contagios a 14, tres de ellas fallecidas la semana pasada. La OMS cifró en 40 los casos sospechosos. El rebrote ha llevado a la Unión Europea (UE) a reforzar su dispositivo de lucha contra la enfermedad, mientras que Turquía ha tomado nuevas medidas para bloquear la expansión del virus H5N1.

Bruselas ha prohibido la importación de plumas no tratadas de Turquía y otros seis países colindantes: Armenia, Azerbaiyán, Georgia, Irán, Irak y Siria. La Comisión Europea no facilitó cifras de estas importaciones, pero recordó que ya vetó en octubre la importación de animales vivos y productos derivados de pollo de estos países.

VIRUS EN EXPANSION Preocupa sobre todo a las autoridades que los nuevos casos están surgiendo en provincias turcas diferentes: Sansum y Kastamonu (junto al mar Negro), ‡orum (centro-norte) y Van (en la frontera de Irán). Esto indicaría que no se está controlando la expansión del virus entre las aves de Turquía.

Los contagios han superado la cuarentena impuesta en las cinco provincias más orientales y se han extendido por la zona occidental de Turquía. Según el Ministerio de Agricultura, en 10 de las 81 provincias se han detectado animales infectados. Tras la detección de varios casos sospechosos en Estambul, el temor ahora es si el virus proseguirá su avance hacia occidente y, si es así, cuándo.

De momento, según la OMS, parece que los pacientes han adquirido sus infecciones por estar en estrecho contacto con aves enfermas. El contacto entre personas y animales aumenta en invierno, ya que a causa de las bajas temperaturas los granjeros permiten la entrada de ganado en sus casas. "Nada indica que la transmisión se haya dado de humano a humano. Es similar a lo que hemos visto hasta ahora", aseguró Guenal Rodier, miembro de un equipo de investigación sobre gripe aviaria que la OMS ha enviado a Turquía.

A pesar de que se han escuchado algunas voces críticas sobre la actuación de las autoridades turcas frente a la infección, los especialistas de la OMS aseguraron que este país está tratando con

éxito el brote.

No obstante, ha cundido la alarma entre los ciudadanos que acuden a los hospitales en busca de tratamiento. De momento, unas 70 personas han sido hospitalizados por sospecha de haberse contagiado. Según el ministerio de salud turco, 30 están ingresadas en el área de Van, 20 en Ankara y 21 en Estambul.

El Ministerio de Sanidad recordó ayer que mantiene activadas las medidas de vigilancia y está en contacto con la OMS y el Centro Europeo de Control de Enfermedades Infecciosas.