Se cumple un año de una legislatura histórica en Villanueva. El PSOE obtenía el mayor número de concejales --16-- que un partido había logrado jamás; pero también por primera vez en la historia democrática de este ayuntamiento se establecía el bipartidismo. Circunstancias que han marcado este primer año de legislatura. IU vio como se cumplía la tendencia regional, y perdía su único representante municipal. También desaparecía SIEX al perder a sus dos concejales. Y dos ediles menos lograba el grupo mayoritario de la oposición, el PP que pasaba de los 7 del 2003, a los 5 del 2007. Con una corporación municipal en la que el gobierno --por segunda legislatura presidido por el socialista Miguel Angel Gallardo-- ostenta la mayoría absoluta frente a una oposición con sólo 5 concejales, el debate político ha quedado debilitado.

Basta mirar a los resultados electorales regionales y nacionales para analiza lo ocurrido y comprobar que se da una época de grandes partidos políticos, impulsado por el "voto útil". No obstante, el caso del PP de Villanueva es singular: el que fuera presidente y candidato, Víctor Fragoso, renunció al cargo; y su sucesor, Eduardo Torres, renunció a su candidatura a mes y medio de los comicios. A pesar de la premura, los populares supieron rehacerse y conformar su candidatura. La falta de presidente tampoco ayudó al partido, ahora dirigido por una gestora. De cualquier forma, poco operatividad tiene un partido con 5 concejales frente a un gobierno con 16. Sus propuestas no son escuchadas y sus mociones no son debatidas ni aceptadas.

Para el alcalde ha sido un año de gestiones que han servido para contar con un palacio de congresos y adquirir los terrenos para el nuevo ferial; han continuado la modernización de la zona centro y se ha iniciado la revisión del PGOU. Afirma Gallardo que en este año han cumplido su objetivo de mejorar el servicio de recogida de basura y limpieza viaria "gracias a su externalización".

Una visión que contrasta con la oposición. El presidente de la gestora, Fernando Tapia, dice que ha sido el año de la subida de impuestos y "privatizaciones desenfrenadas de servicios" y critica el sectarismo político del gobierno respecto al personal y a la oposición. Dice que a pesar de su poca fuerza, nunca el PP había hecho tanta política plasmada en 10 mociones que el gobierno no les ha permitido debatir. "Lo mínimo es pedir que no se impida el uso de la palabra".

*Periodista